HISTORIA CLASICA DE LA
OIAT
Tomado de: Autor
Gonzalo René López Cepeda
Imagenes: Cortesia Archivo Lcdo Jhonny Valencia
Esta
es una verdadera y selecta obra ecuatoriana que se ofrece a toda clase de
lectores, tanto interna y externa por
cuanto las nuevas juventudes lo desconocen y por esta razón en su contenido general se hace conocer los
motivos para lo cual fue creada dentro de la Institución de Tránsito su meta y
convivir hacia el futuro que en el transcurso del tiempo y el espacio ha sido
positiva y provechosa, motivos por los cuales ha llegado a la cima de altos niveles que la coloca en
un excelente sitial policial, no solo a nivel local, nacional e internacional
sino que debido a que estas metas fueron logradas a base de sus trabajos
investigativos difíciles que tuvo que afrontar y que pudo establecer con
resultados y éxitos halagadores, en contraste
con otros departamentos policiales que inclusive vinieron del exterior
los mismos que fracasaron. Y se sustenta este plausible y reconocido criterio
cuando va aunado a su infatigable labor
y sacrificado trabajo abnegado de quienes sirvieron en sus filas que entregaron
lealtad y honestidad en cumplimiento de
su deber, a disposición de la comunidad que se deben y por ende en particular a
la superioridad del ramo.
FUENTES DE INFORMACION
Para
hacer posible la realización de esta obra, se hace hincapié que su autor
perteneció a sus filas y en este mismo ámbito fue necesario basarse en reseñas
periodísticas de épocas pretéritas y como no podría ser de otra manera hubo la
colaboración voluntaria y espontánea, tanto oral y fotográfica de algunos
miembros del Departamento, situación plausible que fue determinante para su
conclusión, ya que sin aquellas informaciones no habría sido posible realizar
esta magna obra en su mayor magnitud. Para todos ellos que hoy orgullosamente
están en retiro va mi profundo agradecimiento e imperecedera y eterna gratitud.
Y en este mismo contexto incluyo este agradecimiento a los señores Miembros del Consejo Editorial MEMORIAS QUE
EDITARON LA REVISTA OIAT, Medio Informativo que publica e informa todo lo
relacionado al quehacer y movimientos logístico de la Institución de Tránsito y
de la OIAT en la actualidad, loable iniciativa
que ha tenido mucha aceptación y beneplácito general dentro del
convivir, local y nacional, situación beneficiosa que a traído un positivo resultado en el sentido que se
está reeditando el fructífero pasado que tuvo este destacado Departamento,
desde su creación.
NOMINA DEL PERSONAL DE LA
OIAT QUE PRESTARON SU COLABORACION PARA LA CULMINACION DE ESTA OBRA
SUB-OFICIAL
ARMANDO LENIS AYALA
SUB-OFICIAL
GERMAN SIMISTERRA
GONZALEZ
SARGENTO PRIMERO
SEGUNDO ANDRADE CHAVEZ
PARALELAMENTE NOS MOTIVA A
PUBLICAR LA NOMINA DEL PERSONAL DE MEMORIAS
Prefecto
Doctor LEONEL POZO MOREIRA DIRECTOR
Insp. Lcdo. JOSE
ARIZAGA PAREDES SUB-DIRECTOR
Insp.
Lcdo. LUIS GOMEZ BONILLA
JEFE DE REDACCION
Lcdo.
JHONNY VALENCIA VALENCIA
ASESOR Y CORRECTOR DE
PRUEBAS
Sr. CPA. OSCAR PERERO FIGUEROA COLABORADOR
Srta.
LEONELA POZO BURGOS
COLABORADORA
EN EL MISMO ORDEN
RENDIMOS UN MERECIDO HOMENAJE POSTUMO A LOS MIEMBROS DE
LA OIAT QUE NOS PRECEDIERON AL MAS ALLA.
JEFE
DE LA OIAT MAYOR MARIO ALFONSO LAMOTA RIVAS
JEFE
DE LA OIAT MAYOR VICTOR LAYANA GARZON
SUB-TENIENTE CARLOS MOLESTINA
SUB-OFICIAL JOSE
AGUILERA VILLAMAR
SUB-OFICIAL GERMAN SORIANO SOBERON
SUB-OFICIAL OTTO MANRIQUE TOALA
SUB-OFICIAL PABLO
SUAREZ HURTAREZ
SARGENTO
PRIMERO JULIO MINCHALA VERA
SARGENTO
PRIMERO LUIS CORTEZ MENDOZA
SARGENTO
PRIMERO GREGORIO OLVERA CARPIO
CABO
PRIMERO ALFREDO
ALBUJA SANTILLAN
CABO
PRIMERO ENRIQUE AGURTO ESPINOZA
CABO
PRIMERO ALFONSO ECHERRY BARZOLA
REGRESANDO
AL PASADO
DATOS INTERESANTES Y
NECESARIOS
Remontándonos
a la bruma del tiempo tenemos que señalar que por informaciones fidedignas
recogidas de los elementos que estuvieron
allá por el año 1953 en la creación de este necesario Departamento
adjunto al Cuerpo de Vigilancia de la COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS, indican
que es obvio que como toda Institución policial o militar posee un personal
investigativo, en el nuevo Cuerpo
uniformado no podía ser la excepción. Era imprescindible tenerlo debido a una
finalidad y razón fundamental. Hacer cumplir las órdenes pertinentes de
capturas y citaciones a los conductores, boletas que emitían los dos comisarios
de Tránsito en aquella época y controlar a los propios vigilantes que cometían
faltas disciplinarias. A la sazón
paralelamente se desempeñaba como JEFE DE TRANSITO GABRIEL GOMEZ SANCHEZ y como
DIRECTOR EJECUTIVO ESTABA el SEÑOR VICTOR MANUEL JANER, ciudadano español
afincado desde hace muchos años en Guayaquil. Distinguido caballero muy
conocido por cuanto era propietario de
la imprenta JANER, que estaba sita en la calle Vélez y Pedro Carbo. Por esta
razón podemos deducir con certeza que
los primeros miembros fundadores de este DEPARTAMENTO que antes tenía por
nombre OFICINA DE CAPTURADORES, estaba
al mando de un Oficial y los subalternos tenían
rango de tropa. Aquellos fueron.
ü SUB-TENIENTE CARLOS
MOLESTINA
ü VIGILANTE VICTOR
LAYANA GARZON
ü VIGILANTE JOSE
AGUILERA VILLAMAR
ü VIGILANTE OTTO
MANRIQUE TOALA
HABIENDO HECHO CONOCER
ESTOS DATOS TAN IMPORTANTES, PROSIGUIENDO PODEMOS EXPRESAR CON MUCHA
SATISFACCION LO SIGUIENTE SOBRE LA OIAT.
v
UNA
RESPUESTA POSITIVA Y GENIAL
v
UNA
MIRADA A SU GRANDIOSA Y EXCEPCIONAL TRAYECTORIA
v
UNA
OPORTUNIDAD PARA QUE EL PERSONAL DE LAS NUEVAS GENERACIONES ADQUIERAN MAYORES
CONOCIMIENTOS.
v
SINTESIS
COMPLETA
PRIMERO
UNA RESPUESTA POSITIVA Y
GENIAL
Basada
en hechos magistrales que hicieron posible descubrimientos a base de
investigaciones exhaustivas y prolijas, estableciéndose identidades de quienes
lo cometieron, para posteriormente ponerlos a órdenes de las Autoridades
competentes.
SEGUNDO
UNA MIRADA A SU GRANDIOSA
TRAYECTORIA
Desde
su fundación se describe que tuvo un desafío que cumplir, el cual era
sobresalir siempre adelante con esa mística de progreso, perseverancia y
abnegación a su trabajo al servicio de la colectividad y superiores, en un campo
tan difícil como es la investigación de accidentes de tránsito relevantes que
estaban quedando en la impunidad. En esta sacrificada labor ha seguido
progresando de manera ascendente hasta esta fecha contemporánea sin desmayar en
sus verdaderos propósitos, la cual es mantener esa grandiosa trayectoria con
que se inició.
TERCERO
UNA OPORTUNIDAD PARA QUE
EL PERSONAL DE LAS NUEVAS GENERACIONES ADQUIERAN MAYORES CONOCIMIENTOS
Con
lo expuesto se concluye que se han dado pasos trascendentales y agigantados
basados en trabajos arduos en investigación y se han buscado en otros ámbitos
nuevos mecanismos, como es la realización de cursos de preparación en la
materia a todo su personal, y como consecuencia hemos visto sobresalientes
resultados en este infalible e importante departamento al cual se lo ha
calificado muy eficiente, honesto y responsable. Hechos que se están palpando a
la luz pública y que se renueva constantemente a base de trabajo y sesudos
estudios para alcanzar más privilegios como lo fue desde sus primeros
cimientos. Y en concordancia cabe aquí resaltar que cuando estuvo al mando de
su jefatura en este brillante grupo investigativo el incansable y leal Prefecto
LEONEL POZO MOREIRA, asistido por el Insp. Lcdo. JOSE ARIZAGA PAREDES, buscó
por todos los medios posibles a su alcance darle a este departamento el nivel y sitial que le corresponde dentro
del concierto de los otros departamentos, policiales, militares y aduaneros.
Para lograr esta meta que era una obsesión, un sueño deseado hace tiempo, que
para lograrlo no hubo obstáculos que se lo impidiera. Y es por este motivo que
hoy día está en la galería de los grandes y emblemáticos personajes que han
pasado por esta Institución desde su fundación, buscando siempre poner en lo
más alto a este departamento y al mismo tiempo procurando el bienestar general
para sus compañeros de fila que han compartido juntos sus sacrificios y
penurias con un fin determinado y específico de proteger a la ciudadanía en
general y la patria toda. Con sencillez y cortesía recibió la felicitación de la superioridad,
demostrando con esa humildad que lo caracteriza ser recíproco en todo sentido
devolviéndolo con un saludo cervical de
su cabeza y en respuesta manifestó que
era su obligación, moral y material servir sin esperar recompensa alguna y
halagos, sino quedándole personalmente la satisfacción del deber cumplido.
RESEÑA
IMPORTANTE QUE HAY QUE DESTACAR
Aprovecho
esta oportunidad y en estas líneas para hacer conocer que fue el doctor LEONEL
POZO MOREIRA, cuando desempeño la jefatura de la OIAT., donde dejó huellas de
ser uno de los gestores para que se haga
realidad de que salgan a la luz actual
el positivo pasado de la OIAT., y se recobre y se actualicen al mismo
tiempo sus archivos que habían
desaparecido en los insondables senderos
de la negligencia y un que me importa de quienes tuvieron la
responsabilidad de conservarlos. Actualmente parte de ese antiguo archivo se ha
rescatado gracias a la cooperación y apoyo de los antiguos elementos que
orgullosamente pasaron por sus filas décadas atrás. Por este singular motivo la
OIAT y quienes fueron parte de este departamento entraran en la gloria del
tiempo y el espacio. Aún más, el Coronel Pozo
fue el impulsor con el apoyo del Directorio de la Entidad para que un
escogido y selecto primer grupo de Oficiales asistan a un curso avanzado de
investigación de tránsito y peritaje en Quito, en el departamento del SIAT de
la Policía Nacional el 10 de enero del 2003. Una vez concluidos con éxitos,
recibieron las debidas felicitaciones de la Superioridad y la prensa lo destacó
en sus primeras planas.
NOMINA DE LOS
ASISTENTES AL CURSO
PREFECTO DOCTOR LEONEL POZO MOREIRA
CAPITAN ABOGADO RENE
GARCIA ANDRADE
CAPITAN WASHINGTON DIAZ CARDONA
CAPITAN JOSE
ARIZAGA PAREDES
CAPITAN WILLIAM
BORJA ROJAS
CAPITAN WILSON
PRADO SILVA
CAPITAN MIGUEL
ROSERO HUACON
TENIENTE CRISTIAN
BRIONES NAVARRETE
TENIENTE JUAN PLUAS BARCIA
TENIENTE JIMMY
INTRIAGO BURGOS
TENIENTE ALES
DUMES ALCIVAR
TENIENTE JULIO VASCONEZ BUSTILLO
TENIENTE WASHINGTON BAJAÑA GOMEZ
Siguiendo
en esta provechosa trayectoria, logró conseguir ante sus superiores la
designación de tres capacitados Oficiales para un curso avanzado en la misma
ciudad capital, en el SIAT de la Policía Nacional y con el aval de la Guardia
de Tráfico de Mérida, España. Los citados Oficiales fueron.
ü CAPITAN RENE
GARCIA ALCIVAR
ü CAPITAN WASHINGTON
DIAZ CARDONA
ü TENIENTE JUAN PLUAS BARCIA
Posteriormente cuando se desempeñaba como JEFE
DE TRANSITO DEL GUAYAS, fue el artífice e impulsor para que un grupo de
Subtenientes y Clases asistan a un curso de investigación de Tránsito.
CUYA NOMINA ES LA
SIGUIENTE
ü SUB-INSP. I MARCOS
PONCE
ü SUB-INSP. I
EDWIN BORJA
ü SUB-INSP. I
CARLOS ROJAS
ü SUB-INSP. I
JHON INTRIAGO
ü SUB-INSP. I CARLOS
CEVALLOS
ü SUB-INSP. II BYRON RIZZO
ü SUB-INSP. II JONATHAN
TORRES
ü SUB-INSP. II
ISSAC MANZO
ü SUB-INSP. II FERNANDO MOREIRA
ü SUB-INSP. II HIPATIA VARGAS
ü SUB-INSP. II ROSARIO SANDOVAL
ü SUB-INSP. II JULIANA PEÑA
ü SUB-INSP. II CARMEN
MONTERO
ü SARGENTO PLACIDO
AVILES
ü CABO KLEBER
CONRADO
ü CABO WILSON
BARCIA
Al
culminar el citado curso con todos los debidos aprovechamientos y éxitos
logrados, los mencionados miembros del Cuerpo de Vigilancia fueron homenajeados
en el Casino de Oficiales de la Escuela de Formación de la COMISION DE TRANSITO
DEL GUAYAS.
Fueron
invitados de honor la distinguida dama Arquitecta PIERINA CORREA DELGADO,
hermana del actual PRESIDENTE DE LA REPUBLICA ECONOMISTA RAFAEL CORREA DELGADO.
El Coronel de Estado Mayor de la Policía Nacional HECTOR PAREDES DAVILA
incluidos invitados especiales, en los que constaban personal retirado de la OIAT, entre los que
se hallaba el autor de esta obra, EL ESCRITOR Y NOVELISTA GONZALO LOPEZ CEPEDA,
SUB-OFICIAL ARMANDO LENIS AYALA Y SUB-OFICIAL GERMAN SIMISTERRA GONZALEZ este
último lamentablemente está padeciendo
actualmente una dolorosa enfermedad que lo mantiene postrado en una silla de
rueda.
El
Coronel LEONEL POZO MOREIRA, que desempeñaba la JEFATURA DE TRANSITO, en un
elocuente discurso en este confortable auditorio manifestó, que sin menoscabar
méritos de los actuales miembros del Cuerpo de Vigilancia, así como de la
OIAT., deseaba que recobren su verdadero
sitial y notoriedad que le corresponde desde su fundación. Por tal motivo esta saludable y provechosa
iniciativa sirva para incentivar a las presentes y nuevas generaciones del
Cuerpo de Vigilancia de la Comisión de Tránsito del Guayas. Además que estos
memorables actos salgan a la luz pública para que la ciudadanía en general
conozcan en toda su magnitud y dimensión su grandiosa historia, aunado al
verdadero valor, pulcritud, honestidad, eficacia y trabajo arduo de un
Departamento tan necesario como es la OFICINA DE INVESTIGACIONES DE ACCIDENTES DE TRANSITO OIAT.
Estos
beneficiosos actos nos recuerda que la COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS, en el
año 1957 envió a un selecto grupo de Oficiales a realizar cursos de preparación
en Chicago, Los Ángeles, Miami, San Juan de Puerto Rico, auspiciados por la
Embajada de los Estados Unidos. Así como a Santiago de Chile y Buenos Aires
Argentina. Ellos fueron.
ANGEL
SONNEHOLNERZ VILLEGAS
HERMAN
LEYSKER ARAUZ
GASTON
GILER GILER
MARTIN
RIERA VARGAS
CAPITULO I
EN
ESTE MISMO ORDEN ENTRAMOS DE LLENO A LA HISTORIA Y FUNDACION DE LA CTG. Y DE LA
OIAT.
Corría
el decenio de 1948, época en que el país estaba gobernado por el patricio
guayaquileño CARLOS JULIO AROSEMENA TOLA, quien era conocedor de los problemas que padecía y
afectaban a su ciudad natal, había percibido que el parque automotor iba en
aumento y paralelamente el tránsito vehicular fluía con más intensidad. Por
aquellos tiempos la Policía Nacional estaba hecha cargo de su ordenamiento de
tránsito que era precario e insuficiente por falta de recursos económicos y que
obviamente por este motivo el movimiento del tránsito no podían controlarlo totalmente
y se les estaba yendo de las manos por una razón específica, tenían que darle
prioridad a sus asignadas funciones que es el ORDEN Y SEGURIDAD A LA
CIUDADANIA.
Con
estos referentes nada halagadores para el futuro, las Instituciones más
representativas de la urbe porteña de aquellos años, decidieron unirse en un
solo frente y previos proyectos muy positivos, viajaron a la ciudad capital
donde en una audiencia especial el señor
Presidente de la República los recibió, lugar donde se delinearon varios puntos
con la finalidad de que la ciudad de Guayaquil tenga un tránsito bien ordenado.
Solicitaron muy respetuosamente un proyecto urgente, importante y prioritario.
El pedido era que se forme un organismo que se haga cargo exclusivamente del
tránsito vehicular y que la Policía Nacional se dedique a lo suyo. El señor
Presidente que conocía de este agudo problema accedió de inmediato a tal
petición y mediante un decreto ejecutivo extraordinario y urgente que lo firmó
el 29 de enero de 1948, se dio de inmediato paso a la creación y fundación del
nuevo organismo rector del tránsito que llevaría como nombre. COMISION DE
TRANSITO DEL GUAYAS. Sus funciones específicas eran. DIRIGIR, CONTROLAR,
ORGANIZAR Y PREVENIR EL TRANSITO Y TRANSPORTE VEHICULAR TERRESTRE EN LA PROVINCIA
DEL GUAYAS.
Este
proyecto rezaba lo siguiente. Siendo Presidente Constitucional de la República
del Ecuador el señor CARLOS JULIO AROSEMENA TOLA, en razón del aumento
poblacional de las extensiones urbanas, el incremento de las actividades
industriales y comerciales y el número creciente de los automotores en la
provincia del Guayas, en aquellos días, además al haberse complicado el
problema de tránsito en la provincia para garantizar la seguridad de los
ciudadanos, se consideró crear un organismo de tránsito que se dedique
exclusivamente a las actividades antes mencionadas. De esta manera se fundó la
COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS, con el apoyo de las Instituciones de
Guayaquil. Este naciente ORGANISMO fue creado como entidad fiscal autónoma, pero
sometida a la Ley Orgánica de Hacienda, lo que le permitió a la CTG., gozar de
la prerrogativa que las leyes reglamentos de entonces, vigentes, concedían. Una
vez publicado en el Registro Oficial, el servicio del control de tránsito,
comenzó con 12 Oficiales y 90 vigilantes de tropa, siendo su primer JEFE DE
TRANSITO, EL CORONEL MANUEL DIAZ GRANADOS, quien posteriormente en el gobierno
del señor Galo Plaza Lasso, ocuparía la cartera de Ministro de Defensa. El
segundo JEFE DE TRANSITO FUE EL COMANDANTE WASHINGTON ZAVALA LOOR. Este Cuerpo
de tránsito naciente siguió creciendo, tal es así que actualmente constituye un
ordenado y eficiente contingente de elementos con profunda convicción moral y
cívica al servicio de la ciudadanía. Sobre este mismo contexto muy importante
por cierto, tenemos que referirnos con mucho énfasis a un Departamento creado y
que era como un cordón umbilical, el cual
sobresalió sobre los demás y que estaba adscrito a la Jefatura de
Tránsito. Y este fue indudablemente el CUERPO DE CAPTURADORES, como se lo llamó
inicialmente por sus funciones a desempeñar dentro de la Institución. El mismo
se fundamentaba en muchas razones. Tenía una misión muy riesgosa y de mucha
responsabilidad, la cual era respetar y hacer efectivo el cumplimiento de las
órdenes emanadas que expedían en ese entonces, los Jueces Penales y Comisarios
de Tránsito, en lo que concierne a citaciones y capturas de los conductores de
vehículos, carros, bicicletas, carretas empujadas por seres humanos y las de
tracción animal. Y por supuesto que era obvio que tendrían que realizar
investigaciones de accidentes de tránsito. Como complemento también tenía la
atribución de realizar investigaciones internas en lo concerniente a faltas
disciplinarias del personal de la Institución.
Al
paso de los años, el Cuerpo de Vigilancia se va modernizando de manera
acelerada en la forma y fondo y paralelamente va engrosando más personal. En el
año 1956, siendo Director Ejecutivo el señor ANGEL ULLOA REYES, Y JEFE DE
TRANSITO GABRIEL GOMEZ SANCHEZ, la Institución rectora del tránsito, adquiere
10 radios patrullas, marca Ford, encargadas directamente a la fábrica en
Detroit, Estados Unidos. Motocicletas de origen norteamericanas marca Harley
Davidson, marca BSA de fabricación inglesa
y marca BMW fabricadas en Alemania. Estas últimas poseían cardan, en vez
de cadena. Así mismo grúas, camionetas, jeeps marca Willys de origen de Estados Unidos para los
destacamentos de las zonas rurales que se iba incrementando según las
necesidades y un bus para el transporte de personal. También se adquiere un
potente equipo de radiotransmisión sin dejar de lado la telegrafía Morse que
enlazaba a la ciudad con todos los destacamentos rurales. En otros referentes
importantes que es dable darlos a conocer tenemos que destacar lo siguiente.
Cada vez que se posesionaba un Director Ejecutivo, junto a los también
designados Miembros del Directorio, se los presentaba a todo el Cuerpo de
Vigilancia en una ceremonia especial a las 6 de la mañana para que se los
conozcan. Acudían personal de los dos escuadrones, salientes y entrantes, francos y de los destacamentos. El Comandante
era el encargado de presentarlos a Oficiales y tropa.
ANIVERSARIO DE
FUNDACION
En
cada aniversario de fundación de la Institución se organizaban desfiles
ruidosos de todo el equipo motorizado,
antiguo y nuevo por las calles principales de la ciudad, con la finalidad que
la ciudadanía observe que sus impuestos que pagaba estaban bien invertidos. Los
miembros del Cuerpo de Vigilancia concurrían en romería hasta el cementerio
general a depositar una ofrenda floral y luego era oficiada una misa por el
Arzobispo de Guayaquil al pie del mausoleo donde descansan los restos de su
patrono y fundador CARLOS JULIO AROSEMENA TOLA.
LLAMAO
También
había los llamaos cuando hacendados, como el señor Julio Ronquillo del cantón
Daule que apreciaban mucho a la Institución y a los vigilantes, donaban
cabezas de ganado y porcino. Se seleccionaba un lugar amplio hasta donde concurría todo el personal, tanto de
Oficiales y tropa con sus familias a disfrutar de esta opípara comida. Así
mismo se organizaban campeonatos de indor fútbol entre todos los departamentos
Uno de los mayores entusiastas para que este evento tenga todos los éxitos
deseados, era el capitán MARIO LAMOTA, quien alineaba al frente de su equipo de
la OIAT. Otro acto especial por este motivo era la presentación de un
espectáculo atractivo que lo realizaban un escogido grupo de motociclistas,
único en Sudamérica, en las que sobresalían sus proezas y pericias en una serie
de piruetas acrobáticas riesgosas. La más peligrosa era cruzar un círculo de
fuego, pararse de cabeza en su asiento con los pies para arriba y maniobrarlo
apenas con una mano, elevar verticalmente su moto y circular con las ruedas
traseras. Por tan singulares proezas se los llegó a catalogar, igual o mejor
que el grupo de la Policía Federal de México. Las personas mayores recordaban
con nostalgia aquella película del año 50 llamada A TODA MAQUINA, con los
famosos actores aztecas, Pedro Infante y Luis Aguilar, donde se apreciaba este
elegante espectáculo. Los abnegados motociclistas de la CTG., demostrando estas
súper habilidades deleitaban a una abigarrada multitud que los aplaudía
frenéticamente, los aclamaba y felicitaba por estas elegantes y riesgosas
acrobacias. Se cerraban estas festividades con el gran baile de gala, tanto de
Oficiales y tropa. Como buen epilogo a todas estas agradables celebraciones, la
superioridad de la Institución, solicitaba la cooperación de la Policía
Nacional para que se haga cargo total del tránsito en la ciudad y provincia
incluido los destacamentos, al igual que el servicio de prevención durante tres
días. De esta manera el Cuerpo de Vigilancia disfrutaba alegremente y tranquilo
estas festividades.
En
conclusión a esta breve historia de la COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS Y SU
CUERPO DE VIGILANCIA, resaltamos un capítulo especial dentro de su vida
cotidiana. En el gobierno que lo presidía el señor GALO PLAZA LASSO, presidente
de la república en el periodo 1948-1952, siendo su Vicepresidente el Doctor
ABEL GILBERT PONTON, una de sus hijas se unió en matrimonio con el Vigilante de
Tránsito ENRIQUE HEYNERT URIGUEN. Este suceso llenó de mucho regocijo, orgullo
y satisfacción al Cuerpo de Vigilancia y paradójicamente se rompió un esquema,
el cual era la diferencia abismal de clase social. Por este acontecimiento que
tal vez sea único dentro del ámbito internacional en lo que atañe a los agentes
policiales, sale a colación una circunstancia muy importante que no tiene por
que desmerecer a los actuales agentes de tránsito. Los Vigilantes fundadores de
aquella época tenían otra clase de aprecio que tal vez se fundamenta en el
sentido de que era un organismo nuevo, sus elementos, con estaturas que pasaban
de 1.75, bien parecidos y con excelente presentación con sus uniformes completos y que al dar
tránsito en sus respectivas esquinas,
montados en visibles taburetes ubicados principalmente en el boulevard 9 de Octubre, llamaban la
atención de los transeúntes por la elegancia de sus movimientos. Uno de los más
admirados era un vigilante de color de apellido NAZARENO. Todas estas
cualidades como es natural abonaban una situación muy plausible en que el
vigilante era el verdadero espejo de la
ciudad por aquellos años de la alta sociedad guayaquileña, así como de los
turistas, tanto nacionales como extranjeros que visitaban el puerto principal,
quienes a la primera persona que se le
acercaban era al agente de tránsito con la finalidad de que los guie en sus
recorridos que iban a realizar por la urbe porteña. Eran atendidos en sus
peticiones Respondían con una educación
culta y gentil. Sobre esta misma referencia hay que destacar que
lamentablemente existen elementos uniformados que muchas veces hacen quedar mal a la Institución y al
uniforme. Nuestros jefes e instructores de esos tiempos, como fueron uno de sus
fundadores, el capitán Luis Nieto Pico y el capitán Lucas Thomas Triviño, nos
daban las debidas instrucciones en el sentido de que seamos un poco elásticos
en nuestras actuaciones frente a los conductores. Era potestad del vigilante,
llamarle la atención, amonestarlo o citarlo. Voy a citar un caso en el cual
tuve que intervenir drásticamente para evitar un problema internacional. El
hecho que voy a referirme fue por el mes
de agosto del año 1972. Como jefe de una patrulla nocturna, a las 2 de la
madrugada fui llamado urgentemente por
radio para que me acerque inmediatamente hasta el redondel donde existía un
pedestal del Club de Leones, cerca del ingreso al aeropuerto Simón Bolívar. Al
llegar al sitio observé que un cabo de apellido Naranjo discutía acerbamente
con unos individuos elegantemente vestidos, junto a un vehículo. Por tener el
grado de sargento inquirí que ocurría. Visiblemente alterado me dio parte que
una de estas personas acompañados por tres damas, el que conducía estaba
oloroso a licor y principalmente no tenía licencia de manejo y por este motivo
quería llevarlo a la prevención, pero se resistía hacerlo. Una vez que atendí al cabo en referencia,
procedí hacer lo mismo con la otra parte. El conductor aludido me dio las
siguientes explicaciones. Que él es funcionario diplomático de la república
federal de México y el resto de varones. Prosiguiendo indicó que habían venido a este país para conocerlo
por cuanto tenían buenas referencias de sus lugares turísticos y de las Islas
Galápagos y de la hospitalidad de los ecuatorianos. Como es natural para
conocer y recorrer esta ciudad habían arrendado el vehículo en una agencia de “renta
car” y como es obvio habían invitados a unas damas para que los acompañen. El
lío que les armaba el agente de tránsito y lo quería detener, se debía por una
razón fundamental, no tener su licencia de manejo en ese momento ya que la misma se le había olvidado junto
a su documentación diplomática en el Consulado de su país. Por tal
circunstancia le pedía de manera respetuosa un favor especial que lo acompañe a
su legación para mostrarles sus
documentos, petitorio que se negaba tenaz y rotundamente y a toda costa quería
llevarlo preso. Como superior dispuse que vayamos hasta el Consulado de México
para verificar estas aseveraciones, indicándole que no es nuestra obligación ir
hasta el domicilio sino que bajo estas circunstancias especiales que manifestaba ser diplomático se accedía a
tal petición. Efectivamente el personal
de guardia de este lugar saludó muy respetuosamente a esta persona, quien
ingresó de inmediato y a los minutos retornó con toda su documentación en
regla. Ordené que se lo deje en libertad, pero con una condición de que no
conduzca por haber ingerido licor. Aceptó tal pedido. Instantes después este funcionario mexicano me dio las
consabidas gracias por esta deferencia especial y reconocía que como en toda
Institución policial hay elementos comprensibles y otros necios. En tono serio
manifestó que en si caso lo hubieran detenido de una manera irrespetuosa y
grosera se iba a llevar las peores impresiones del Ecuador y no retornaría más
y por otro lado haría conocer a sus superiores el indebido trato que se da a los
extranjeros, pero gracias a que hay
excelentes elementos en esta Institución que llama COMISION DE TRANSITO DEL
GUAYAS, lleva los más gratas impresiones y hermosos recuerdos de su visita a
este bello país. Con bastante melancolía
recordó que los agentes de tránsito mexicanos tienen bastante parecido a
los uniformados de esta ciudad. Me hizo una invitación gentil para que conozca
su patria, en reciprocidad a mi buena actuación. Deferencia que la acepté
cordialmente.
Prosiguiendo
en la historia de la COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS Y SU CUERPO DE VIGILANCIA,
tenemos que reseñar un capítulo muy resonante. Y es el siguiente. En años
recientes a su fundación, había una elegante y apuesta dama de apellido
BAQUERIZO que frecuentemente circulaba por la avenida 9 de Octubre conduciendo
su vehículo. Pero es el caso que esta hermosa mujer cuando cometía una contravención, el
vigilante como es natural por medio de un pitazo le indicaba que pare. ¿Pero
qué sucedía cuando el agente de tránsito se le acercaba a solicitar su
credencial de conducir. Estando frente a ella
se quedaba estupefacto y abobado al observar que la dama aludida en vez
de tener la licencia de manejo en su mano, se alzaba su vestido y la tenía
puesta en una de sus piernas, cerca de su prenda íntima. Mirándolo fijamente le
decía tome la licencia. Esta sorpresiva
actitud de la conductora lo desarmaba por completo y no le quedaba otro recurso
que dejarla ir por no verse en problemas.
También
hay que resaltar un hecho inusual que lo inició la colonia italiana afincada en
esta metrópoli, el año 1957 y que es costumbre en el país de la bota, al
culminar el año, o sea el 31 de diciembre, como una demostración de
agradecimiento a su abnegado, sacrificado y arduo trabajo se agasaja a los policías de tránsito en sus
puestos de trabajo obsequiándoles regalos de diferentes clases, como vinos,
confites, dulces y pequeñas mercancías. En el caso que nos atañe en lo que
respecta a Guayaquil, un espigado Vigilante de nombre y apellido
Carlos Coello Jhonson que estaba de servicio dando circulación en las calles 9
de Octubre y Boyacá, recibió un atractivo regalo para esa época, de una nueva y
flamante bicicleta de buena marca que la obsequiaron los propietarios de los almacenes PIKA, almacén que estaba situado en la mencionada
esquina y que sigue actualmente. Y así
por el estilo a lo largo de la avenida 9 de Octubre donde se hallaban de
servicio esa noche los demás vigilantes recibieron gran cantidad de regalos.
Esta benevolente iniciativa de
agradecimiento de la colonia italiana, lamentablemente no fue secundada
por la propia ciudadanía guayaquileña y con el transcurso de los años fue
perdiendo vigencia, hasta que desapareció definitivamente. Sería muy saludable
que se ponga en práctica nuevamente esta iniciativa. Tienen la palabra, los
señores Miembros del Directorio y el Comando, para que sea pronto una
inobjetable realidad. Otro
ciudadano guayaquileño de grata
recordación que le tenía cariño y aprecio a la Institución de Tránsito y a los
miembros del Cuerpo de Vigilancia, fue el señor BOHORQUEZ, propietario del
almacén LA CASA DEL PAÑUELO, ubicado en las calles 10 de Agosto y Pedro Carbo.
Siempre se hacía presente obsequiando productos que distribuía.
NUEVO TIMON EN EL
CUERPO DE CAPTURADORES
En
el año 1954, asume el cargo como Jefe de CAPTURADORES, MARIO LAMOTA RIVAS con el grado de Cabo,
quien le da un nuevo giro en el accionar de este Departamento gracias a que
ingresan nuevos elementos preparados y capaces en estos menesteres, en que
además les asignan un nuevo local
funcional dentro del edificio de la Institución y que se manifestaba investigando y resolviendo casos que estaban
quedando en la impunidad, así como lograr capturas de choferes prófugos. Seguía
como Jefe de Tránsito y Comandante del Cuerpo de Vigilancia GABRIEL GOMEZ
SANCHEZ, quien posteriormente renunciaría.
El indetenible tiempo seguía su marcha y durante este lapso hay una
sucesión de Jefes de Tránsito que eran civiles venidos de la calle. A pesar de
estas falencias el Cuerpo de Capturadores seguía laborando normalmente y
engrosando personal nuevo traído de fila.
En
el año 1957, es adquirido un terreno situado en Chile y Brasil, que colindaba
con el edificio ubicado en las calles Chile y Cuenca y que estuvo ocupado años
atrás por los carabineros, hasta que se desató la revolución, del 28 de mayo de
1944. En aquellos terrenos se construyó un nuevo edificio y que actualmente
alberga muchas oficinas y departamentos que controlan la buena marcha de la
institución. Paralelamente la Comisión de Tránsito compró la manzana que cubre
las calles Chimborazo, Brasil, Cuenca
donde estaba ubicada una feria libre permanente.
En
el tiempo que la OIAT., estaba al mando del capitán MARIO ALFONSO LAMOTA RIVAS,
implementó varios proyectos positivos y programas con el fin de que la marcha
de esta Oficina tenga una real objetividad. Tal es el caso que creó la galería
de los choferes sindicados por accidentes de tránsito y delitos penales. Lo
propio se hizo con los conductores que frecuentaban las terminales de transporte
intercantonal y provincial, como taxistas, a las más conocidas, como REINA DEL
CAMINO, SEMERIA, TRANSPORTES ECUADOR, IMBABURA. Muchos de estos cobraban de
manera abusiva y excesiva las tarifas, principalmente a personas venidas del
campo y cuando no accedían pagar le arranchaban sus aves de corral, como, pavos
y gallinas. Otras veces les robaban. Cuando había una denuncia por parte de
algún perjudicado sindicando a estos choferes, se les mostraba sus fotografías,
e inmediatamente eran identificados. Se procedía al momento a localizarlos en
sus centros de operaciones y llevados prontamente a la OIAT., donde se les
obligaba que devuelvan lo apropiado indebidamente, para luego ponerlos a
órdenes de las autoridades pertinentes. Como por aquella época existían control
de despachar los vehículos de transporte inter cantonal a la segunda zona rural
que se lo efectuaba en el antiguo Parque Chile y a la primera zona rural en el
Parque Victoria, abundaban los llamados enganchadores, los mismos que no tenían
tan buena reputación. Por esta razón se los citó a la OIAT., donde se les tomó
una foto para tenerlos en un archivo a futuros reclamos.
HOMENAJE
Prosiguiendo
en este mismo contexto, tenemos que señalar que en esta obra estelar y clásica
se hace constar que va dedicado a un gran personaje que tuvo que ver mucho en
la creación de la OIAT. Por tal motivo es necesario rendirle un sincero y
profundo reconocimiento de imperecedera gratitud y estimación al emblemático,
honesto, abnegado y pundonoroso Oficial de Tránsito. Se trata del MAYOR MATIO ALFONSO LAMOTA RIVAS. Fundador de tan egregio departamento,
orgullo de los Guayaquileños y Guayasenses en general. De igual manera se hace
extensivo este merecido homenaje para aquellos sacrificados subalternos que compartieron
ese trabajo arduo y difícil y muchas veces incomprendido, como era esa tenaz
lucha diaria sin cuartel, pese a no contar con los elementos modernos y
necesarios que no se compartían en aquellos años. Y a pesar de aquellas
carencias notorias muchísimos casos de investigación que tenían pocos soportes en cuanto a personas que podían testificar y débiles evidencias, se lograba allanar
casos difíciles, por esa férrea voluntad de servicio y perseverancia, los
mismos que eran resueltos y no quedaron en la impunidad.
SUGERENCIA
Como
una saludable petición y aprovechando las páginas de esta obra clásica, muy
respetuosamente pongo a disposición la siguiente sugerencia, dejando a su mejor y elevado criterio a quienes tengan
que ver en esta justa petición.
Que
la OIAT lleve su nombre. MARIO ALFONSO LAMOTA RIVAS, por haber sido él su fundador y al mismo
tiempo reconocer que gracias a sus virtudes y tesón, este departamento está en
el sitial que le corresponde, fama y trabajos excelentes. Que se desvele en una
sencilla ceremonia su fotografía y perpetuar su memoria como un valioso ejemplo
para las presentes y futuras generaciones que integran e integrarán la OIAT.
Hay
que resaltar otro hecho muy preponderante y se trata de que el capitán MARIO
ALFONSO LAMOTA RIVAS, fue el gestor para que se haga realidad de creación de la
JEFATURA DE CARRETERA, siendo su Jefe y como Sub- JEFE, el Sub-Oficial GERMAN
SIMISTERRA GONZALES y como Secretaria
cabo ROSA HUAYAMABE.
NOMINA
DEL PERSONAL ANTIGUO DE LA OIAT.
CAPITAN MARIO
ALFONSO LAMOTA RIVAS JEFE
SUB-OFICIAL WILLIAM
GARCIA FAJARDO SUB-JEFE
SUB-OFICIAL GERMAN
SORIANO SOBERON INVESTIGADOR
SARGENTO PABLO
SUAREZ HURTAREZ INVESTIGADOR
SARGENTO JULIO
MINCHALA VERA INVESTIGADOR
SARGENTO GONZALO
LOPEZ CEPEDA INVESTIGADOR
CABO GREGORIO OLVERA CARPIO INVESTIGADOR
CABO SEGUNDO ANDRADE CHAVEZ
INVESTIGADOR
CABO ARMANDO LENIS AYALA SECRETARIO
CABO ANGEL QUIROZ YEPEZ CAPTURADOR
CABO ANTONIO MORENO MARFAK CAPTURADOR
CABO VICENTE CASTILLO MOROCHO CAPTURADOR
CABO ENRIQUE
ACUÑA CRUZ CAPTURADOR
CABO JOSE
CORREA DIAZ CAPTURADOR
CABO LUIS
CORTEZ MENDOZA MOTOCICLISTA
CAPTURADOR
CABO ALFREDO
ALBUJA SANTILLAN CHOFER DEL
JEFE CAPTURADOR
CABO RAFAEL
VILLON YEPEZ CAPTURADOR
CABO JORGE
MARTINEZ PEREZ MOTOCICLISTA
CAPTURADOR
CABO LENIN
FARFAN BRIONES CAPTURADOR
CABO ALFONSO
ECHERRY BARZOLA CAPTURADOR
CABO VICTOR
DIAZ ESTRELLA SEGUNDON
SECRETARIO
VIGILANTE JOFREE
RODRIGUEZ MEJIA CAPTURADOR JUDOCA
VIGILANTE JORGE
SUCRE PALACIOS CEVALLOS CAPTURADOR
Sobre
Jorge Palacios Cevallos, hay que resaltar un hecho muy relevante. Que habiendo
ingresado como Vigilante, llegó gracias a sus grandes ejecutorias, ascender
hasta llegar a obtener merecidamente el grado de General de Tránsito en el
Cuerpo de Vigilancia de la COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS.
INTRODUCCION
CAPITULO I
El
autor de esta obra tuvo el honor y
privilegio de pertenecer a este egregio y brillante departamento que es un
cordón umbilical, rama principal, prioritaria e importante del CUERPO DE
VIGILANCIA DE LA COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS, COMO HOY DIA ES LA OIAT. Por
este motivo tengo la gratísima satisfacción de hacer conocer sus logros de su
grandiosa trayectoria gloriosa desde su fundación hacia el futuro y que es un
orgullo que llevan muy adentro, quienes están y sirven en su seno para
beneficio de la colectividad. Me es
dable indicar que para llevar a cabo su realización no se escatimó ningún esfuerzo
con la finalidad de hacer conocer a un extenso y amplio círculo de lectores a
nivel local, nacional e internacional esta obra que sin duda despertará mucho
interés.
Por
aquellos decenios en que el Capitán MARIO LAMOTA RIVAS, tenía a cargo la OIAT,
como Jefe, esta oficina contaba para el desenvolvimiento de sus actividades y
funciones específicas con lo siguiente.
Dos máquinas de escribir antiguas, un viejo armario de madera para
guardar archivos, tres escritorios metálicos, para elaborar informes los
investigadores. El despacho del Jefe tenía un escritorio más amplio y un
teléfono convencional. A órdenes de la
oficina había una camioneta marca
Chevrolet color verde del año 1950.
Posteriormente se la remplazó con otra camioneta del año 1966, con el color
símbolo de la Institución, azul y blanco. Una motocicleta, marca BSA que la
utilizaba un personal designado exclusivamente para realizar diligencias de
entrega de citaciones y capturas a los choferes del servicio urbano de buses y
colectivos. LA OIAT ocupaba un local de mediana amplitud en la planta baja del
antiguo edificio y su ingreso se lo hacía por la calle Chile. Con una
circunstancia especial que desde su interior se podía observar los movimientos
vehiculares y de personas. Esta oficina su puerta fue tapiada cuando
desempeñaba la Dirección Ejecutiva, el señor JARRIN quedando prácticamente
cerrada y aislada con su puerta de salida en su interior. Muchos entendidos en
la materia de seguridad en desastres, advierten y consideran que se corren
muchos riesgos, en caso de que ocurra algún fenómeno natural, como un
terremoto, fuerte temblor, o siniestro de incendio y alarmas de bombas o
explosivos.
HAY
QUE RELEVAR SOBRE UN IMPORTANTE DEPARTAMENTO QUE FUNCIONABA ADSCRITO A LA
OIAT., EL DEPOSITO DE BICICLETAS Y LA ENTREGA DE PLACAS.
Este departamento estaba bajo las órdenes y custodia del sargento ANGEL BARRERA SOSA.
Sus funciones eran llevar un control y estadística de las bicicletas que el Cuerpo de Vigilancia detenía en los
operativos que se efectuaban con regularidad, exigiendo que estén matriculadas
al día y que sus accesorios, como frenos y luces estén en buenas condiciones.
Años atrás se les exigía a los ciclistas licencia de conducir. Sería muy
provechoso que se ponga en vigencia estas anteriores disposiciones. Su otra
función era entregar las placas nuevas a
los propietarios que habían matriculado su vehículo. Antes de la entrega se les
comunicaba a los mismos que era parte de la nueva matrícula que adquieran los
implementos necesarios en todo carro, como son el TRIANGULO DE SEGURIDAD,
BOTIQUIN PARA PRIMEROS AUXILIOS Y EXTINGUIDOR. Tan eficiente era este
departamento que sobresalía principalmente su excelente archivo en el cual
conjugaban el orden, minuciosidad,
prolijidad y acuciosidad de su encargado que lo tenía al día lo poseía. Tal es así que la Secretaria
General de la Institución, por aquellos años,
la desaparecida Abogada ALICIA SANCHEZ BRAVO, continuamente concurría hasta esta oficina a recabar datos
estadísticos de los vehículos matriculados. También frecuentaban este
departamento, miembros de inteligencia de los desaparecidos departamentos de la Policía OID Y SIC, con la finalidad de
recabar datos para sus trabajos de investigación.
Y EL TIEMPO IMPLACABLE
SIGUE SU MARCHA
HAY
QUE RESEÑAR UN HECHO HISTORICO MUY LAMENTABLE Y OSCURO QUE PUDO ECHAR AL TRASTE
LA ESTABILIDAD DE LA COMISION DE
TRANSITO DEL GUAYAS Y POR ENDE EL CUERPO DE VIGILANCIA CUANDO ESTUVO AL BORDE
DE SU DESAPARICION.
Era
un aciago día del mes de septiembre de 1962, el Sindicato de Choferes
Profesionales del Guayas, dirigidos por líderes enemigos acérrimos de la
Institución rectora del tránsito de esta provincia, habían planeado con
antelación dar el zarpazo de gracia contra la COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS.
En aquellos tiempos los choferes de buses y colectivos de esta ciudad imponían
sus condiciones de poder a los gobernantes de turno y una de sus armas que
blandían era que todo el tiempo producían el caos en el tránsito y hacían lo
que les daba la gana con sus enormes unidades, como es el caso de la famosa
tranca, sistema que utilizaban de salir despacio de la estación y después
cuando se veían ahorcados con el tiempo corrían desaforados a exceso de
velocidad, situación lamentable que ocasionaba muchos accidentes con resultados
fatales . Como el personal del Cuerpo de
Vigilancia les frenaba estos abusos se sentían perjudicados. Sus dirigentes
valiéndose de influencias políticas en el Congreso Nacional de aquella época,
habían tenido un acercamiento con legisladores, tanto del Guayas, como de otras
provincias con la finalidad de hacer desaparecer a la Institución rectora del
tránsito afincada en esta ciudad. Se dio
la respectiva votación en el sentido que la COMISION DE TRANSITO DEL
GUAYAS, DESAPAREZCA y se haga cargo del tránsito La Policía Nacional, hecho muy
lamentable para los habitantes de esta provincia por cuanto esta Institución se
sostenía económicamente con un impuesto a la renta del 6%.
Paralelamente
el Sindicato de Choferes organizó una huelga del transporte en esta ciudad,
donde se apreciaba vandalismo por parte de estos conductores y cobradores
revoltosos derivando en batallas
campales con los Vigilantes de Tránsito. En la urbe se vivía un caos y anarquía
total.
Por aquellos lóbregos años no había televisión
en el país, pero los medios de comunicación radiales de esta ciudad liderados por radio EL MUNDO,
cuyo propietario era el señor GABRIEL VERGARA JIMENEZ, tomó la posta para
defender a su querida Institución. En unión de las otras emisoras
guayaquileñas, arengó a este aguerrido pueblo Huancavilca, que posee el título
de ser cuna de las grandes movimientos revolucionarios que han cambiado la historia del país, como
fue el 9 de Octubre de 1820,considerada
como efectiva y verdadera fecha de independencia del Ecuador, la del 6 de
Marzo de 1845 y la revolución liberal
del 5 de Junio de 1895, esta última
liderada por el viejo Luchador ELOY ALFARO, que cambió las viejas
estructuras de este empobrecido país y que ha sido considerado el mejor
presidente que ha tenido esta agitada república. Grandes multitudes de todas
partes de la ciudad, en donde se unieron las personas de todas la clases
sociales salieron a las calles a protestar por este eleve ataque y defender a toda costa a su emblemática COMISION DE TRANSITO, en que
era lamentable que propios legisladores
guayaquileños, traidores, en asocio con los centralistas y siempre
conocidos enemigos de Guayaquil y de las
autonomías estaban a punto de cumplir sus nefastos propósitos. El caso era que
ya el decreto de su desaparición estaba listo para tratarlo con una mayoría,
pero se les vino al traste cuando se enteraron que Guayaquil entero ardía en
sus calles pidiendo la cabeza de aquellos ruines que se habían complotado para
realizar tan execrable acción. Como siempre el centro de reunión del pueblo fue
en la emblemática Plaza de San Francisco, donde anteriormente se encontraba la
estatua de uno de los grandes patriotas que ha tenido esta ciudad. JOSE JOAQUIN
OLMEDO, bajo su eterna mirada severa les parecía decir a las muchedumbres
presentes que protestaban eufóricamente, que no desmayen en su lucha y no
permitan este vil atropello por este
traicionero ataque de los enemigos de esta urbe Huancavilca. Y en tanto desde el balcón de la emisora
radio el MUNDO que se encontraba diagonal de aquel lugar, su propietario con sus fogosos
discursos denostaba contra los propulsores de aquel fatídico decreto. Así mismo
otras personas se turnaban para arengar a ese pueblo que bullía ruidosamente. Por otro lado salió a las
calles todo el Cuerpo de Vigilancia a protestar por el intento de hacerla
desaparecer. Posteriormente para apoyar este multitudinario acto, viajó desde
Quito a Guayaquil el presidente de la república, el doctor CARLOS JULIO
AROSEMENA MONROY y en el mismo balcón de radio El Mundo, acompañado de
prestantes y conocidos caballeros de esta metrópoli, como eran el señor José
Feraud Aroca, el doctor Quiñonez entre otros, en un furibundo, patriótico y
fogoso discurso, manifestó que se ponía a la cabeza para defender a su querida
INSTITUCIÓN que con mucho cariño fundó su padre, CARLOS JULIO AROSEMENA TOLA,
fustigando al mismo tiempo a los eternos enemigos de Guayaquil. Para concluir
manifestó. El día que “LA COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS DESAPAREZCA,
GUAYAQUIL ENTERO ARDERA”. El Congreso
Nacional en horas de la madrugada de aquel aciago día, viendo que la urbe
Huancavilca estaba en pie de lucha hasta las últimas consecuencias, archivó
este negativo decreto y todo volvió a la normalidad. Ese día el transporte
urbano con sus huelguistas se retiró por cuanto la gente quería quemar a sus
unidades y linchar a sus conductores.
PROSIGUINDO EN SU HISTORIA
En
el año de 1963, es depuesto el Presidente Constitucional de la república, el
doctor CARLOS JULIO AROSEMENA MONROY y asume el poder una Junta Militar
presidida por el Capitán de Navío RAMON CASTRO JIJON. En este Gobierno de facto
se hicieron cargo de la administración de la COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS,
Jefes Militares y Policiales. El que más se destacó, fue el Comandante
WASHINGTON MARTINEZ TORRES. Primero ocupó la Jefatura de Tránsito y
posteriormente la Dirección Ejecutiva. Este brillante y capacitado Oficial
Superior de la Policía Nacional, dentro del reordenamiento, tecnificación y
reformas del Cuerpo de Vigilancia, una de sus prioridades fue darle otro giro a
la Oficina de Capturadores y se decidió por darle otro nombre. OIAT.,
siglas para el futuro desenvolvimiento de sus actividades dentro de sus
quehaceres en la Institución de Tránsito y las mismas señalaban OFICINA DE
INVESTIGACIONES DE ACCIDENTES DE TRANSITO.
Y la Institución sigue avanzando y años posteriores observamos como la OIAT
sigue siempre adelante y en el periodo que estuvo como Jefe de Tránsito MARTIN
RIERA VARGAS, quien merecidamente ascendió al puesto de esa Comandancia,
habiendo sido vigilante raso de tropa, EL Jefe de la OIAT lo ocupaba el Capitán
MARIO LAMOTA RIVAS.
INCURSION DE LA OIAT EN OTROS CASOS QUE NO ERAN DE SU
COMPETENCIA
Debido
a la fama que había adquirido desde muy temprana edad por su gran
profesionalismo y eficacia y saliéndose de sus ámbitos específicos para lo cual
fue creada, como investigar los accidentes de tránsito en general, otras
autoridades ajenas al tránsito solicitaban su intervención y cooperación, como
son casos del área penal, asesinatos,
crímenes, robos, asaltos, falsificación de documentos y tantos otros delitos.
Por
sus exhaustivas investigaciones que lograban dar con las identidades de los
autores, cómplices e encubridores, al Capitán LAMOTA se lo llegó a considerar
el Sherlok Holmes guayaquileño.
Es
necesario hacer conocer a los lectores de esta obra, que en el año 1970,
estando al frente de la Institución, el señor ALFREDO ROBLES ZANATA, Director
Ejecutivo y el doctor HECTOR SOLORZANO CONSTANTINE, Presidente, se adquirieron
radios patrullas y motocicletas nuevas. En cuanto a los patrulleros varios de
estos vehículos fueron prestados al
Regimiento de Policía Guayaquil número
2, durante un largo tiempo para que realicen las rondas diurnas y nocturnas. A
mi persona le tocó laborar en estas tareas, junto a los jefes de patrulla, que
estaban comandadas por sus respectivos Oficiales.
CAPITULO II
HECHOS
Y CASOS QUE DIERON RELEVANCIA Y MAS FAMA A LA OIAT DESDE CUANDO LLAMABA
CAPTURADORES Y QUE ESTABA FUERA DE SUS FUNCIONES ESPECIFICAS
CRONOLOGIA
EL CASO DAGER
A
principios del año 1957, se da un caso típico policial. En las primeras horas
de la mañana de un día de febrero, En el acceso a la nueva vía que se estaba
construyendo hacia el aeropuerto Simón Bolívar, donde operaba la desaparecida
compañía de aviación norteamericana BRANIF, hacen su aparición de repente un grupo de forajidos quienes
utilizando de manera ilegal uniformes de vigilantes de tránsito, proceden hacer
detener la marcha de un vehículo donde viajaba un conocido empresario de
Guayaquil de apellido DAGER, el mismo que iba acompañado de algunos empleados
suyos, Los asaltantes portando armas de grueso calibre, amedrentan a todas
estas personas y el señor DAGER es despojado de una fuerte cantidad de dinero que era destinado
para pagar los jornales a sus trabajadores. Rápidamente en otro vehículo
emprenden la fuga sin conocerse sus identidades. Como en este atraco los
delincuentes habían utilizado uniformes de vigilantes, la Jefatura de Tránsito
al mando del Comandante GABRIEL GOMEZ SANCHES, dispone que el grupo de
Capturadores se haga cargo de las investigaciones pertinentes. El Sub-teniente
Mario Lamota Rivas, Jefe del departamento empezó a realizar las pesquisas
respectivas. A base de investigaciones exhaustivas y prolijas, recabando
información reservada, en una semana quedó resuelto este audaz asalto y sus
autores fueron identificados y apresados. La prensa local de la época reseñó
este hecho delictivo. Los implicados prontamente salieron en libertad por
cuanto eran hijos de conocidos ciudadanos influyentes de esta ciudad. La
justicia en nuestro país es así. Se aplica solo para los de poncho como lo dijo
alguna vez el desaparecido Ex Presidente JAIME ROLDOS AGUILERA. De todas
maneras este Departamento cumplió con su
deber.
EN ESTE MISMO AÑO SUCEDE
OTRO SUCESO QUE CONMOVIO A LA OPINION PUBLICA
EL CASO DI PUGGLIA
En
los albores de este mismo año, mes de marzo de 1957, en la calle argentina,
entre chile y Chimborazo, y como
referencia del lugar, actualmente existe la gasolinera ZURITA, se produjo un
atropello en un vehículo conducido por una mujer y en que resultó muerta una dama de apellido
JIMENEZ, sobrina del recordado radiodifusor GABRIEL VERARA JIMENEZ. La causante
de este hecho trágico fue apresada. Hechas las primeras investigaciones por los
vigilantes que actuaron y elevaron el parte respectivo. Inicialmente se creía
que había sido un accidente de tránsito, pero posteriormente familiares de la
occisa, así como testigos presenciales daban informes que aquel accidente fue
provocado intencionalmente y por esta causa se formó una confusa polémica. O
era accidente de tránsito o era un caso premeditado criminoso. Los abogados de
la causante alegaban que era accidente de tránsito, pero supuestamente se vino
al traste esta versión por cuanto la familia de la fallecida tenía datos
reveladores que los daría a conocer en las futuras investigaciones.. Se
disputaban este enojoso y polémico atropello, el Comisario de Tránsito y el
Comisario de Policía. Para desenvolver este difícil ovillo, la Jefatura de
Tránsito a cargo del Comandante Gabriel Gómez Sánchez, dispuso que en lo que
corresponde a la competencia de accidentes de tránsito se haga cargo de este
embrollo judicial, el Sub-teniente Mario Lamota Rivas. Realizadas las
investigaciones pertinentes sobre este bullado caso de una manera prolija y
exhaustivas , en que fueron llamados a declarar, tanto los testigos
presenciales, así como los familiares de la occisa, frente a los abogados de
ambas partes, este Departamento , determinó en su conclusión final del informe
respectivo, que el atropello en que resultó muerta la señora ANITA JIMENEZ, fue
premeditado e intencional por cuanto la causante le lanzó el vehículo que
conducía por odio y venganza sentimental. Además se estableció que los hechos
que precedieron hasta llegar a esta consecuencia fatal, se debió a un triángulo
pasional. La occisa era la esposa del
señor DI PUGGLIA PULITA y la que cometió este mortal caso, era la amante. Como
las investigaciones que realizó esta Oficina,
en el respectivo informe que se elevó a la superioridad, establecía y
determinaba la culpabilidad de la conductora como causante de un crimen
pasional, donde se utilizó un vehículo como arma mortal y por lo tanto quedaba
desvirtuado que había sido accidente de tránsito. Por los resultados en
mención, ella fue condenada a varios años de prisión que los cumplió en la
antigua cárcel municipal de esta ciudad, situada en la calle Julián Coronel.
Como epílogo final quedaba resuelto un caso que por sus implicaciones dudosas y
la argucia de los abogados defensores podría haber quedado en el limbo en cuanto si se lo tomaba
como accidente de tránsito, pero gracias a esa sagacidad, capacidad y
perseverancia de los miembros investigadores de esta oficina al mando del Sub-teniente Mario Lamota Rivas se estableció en su real
dimensión lo que en verdad ocurrió. Así se cerraba este nuevo capítulo como un
sonado triunfo del DEPARTAMENTO DE CAPTURADORES, afianzando más su fama y
credibilidad ante la sociedad
guayaquileña y la patria en general.
EL CASO DELICTIVO LLAMADO
IBARRA ALCANTARA
Los
casos en que le tocaba actuar al Departamento en mención, iban en seguidilla.
En ese mismo año en la entrada de Puerto Liza que era un lugar abandonado,
lleno de maleza, que estaba a la entrada de la calle Venezuela, que todavía no
existía y en los antiguos terrenos que eran desiertos, parajes abandonados y
lleno de montes donde ahora se encuentra el Centro Cívico, actuaba una gavilla
de rufianes y granujas que asaltaban, robaban y violaban a las parejas que
imprudentemente ingresaban hasta aquellos matorrales para dar rienda suelta a
sus instintos sexuales.
Como
estos hechos delictivos llegaron mediante denuncias reservadas a oídos de las
autoridades y por lo visto era de competencia exclusiva de la policía, pero
según un rumor muy acentuado se decía que el cabecilla de esta banda de
facinerosos la comandaba un sujeto que tenía licencia de chofer. Por esta razón
se solicitó la ayuda y cooperación
del Sub-teniente Mario Lamota,
quien inició las respectivas investigaciones para atrapar a estos delincuentes.
Con un escogido personal a base de seguimientos nocturnos se logró pescarlos
infraganti en sus taimados actos. Se estableció que quien comandaba esta
peligrosa banda de granujas, llamaba IBARRA ALCANTARA. Fueron puestos a órdenes
de las autoridades competentes. Se cerraba así mismo otro destacado capítulo
que acrecentaba el prestigio de esta Oficina de Investigaciones.
LOS HOMBRES RATAS
Por
la década de los años 60, la Prensa Nacional reseñó en grandes titulares sobre
las actividades fuera de lo común en que habían incursionado varios sujetos
antisociales, valiéndose y utilizando un medio que para las personas normales
les hubiera costado la vida. El método empleado
era introducirse por una alcantarilla que cruza parte del centro de la ciudad como lo hacen LAS RATAS
y demás roedores y su finalidad era para cometer un ROBO. Sus planes y modus
operandi consistió en ingresar con los implementos necesarios por una tubería
de aguas lluvias que arrojaba los
desechos al río Guayas y de ahí avanzar
con todas las incomodidades y riesgos
que el caso suponía hacia su objetivo que era saquear la joyería LUXOR situada
en las calles Aguirre y Pichincha colindante con el antiguo Banco de Descuento.
Para dar este audaz golpe aprovechaban la marea baja del río para
introducirse. Efectivamente en su avance
como animales mismos, al cabo de varios días con sus noches presumían que
estaban cerca para dar el golpe perseguido. Por otro lado uno de sus compinches
que era el encargado de darles la ubicación exacta del lugar por donde tenían
que romper el suelo, visitaba por esos días un almacén de ventas de discos que
estaba unido a la pared de la joyería LUXOR
y simulando ser un Porfirio Rubirosa cortejaba a una dama que atendía su
venta indicándole que le ponga música
movida y siguiendo su ritmo cadencioso con la suela de sus zapatos golpeaba
fuertemente el pavimento del local
haciéndose presente a sus compañeros de fechorías que era el sitio por
donde tenían que empezar a emerger. Proseguían avanzando los hombres ratas
acercándose al lugar escogido, y lo hacían
en el más completo sigilo, de todas maneras se
dejaban escuchar, tenues leves y perceptibles ruidos que el guardián de
la joyería después de descubrirse el robo cometido declaraba que para su concepto creía que aquellos débiles
ruidos provenían de almas en pena o eran fantasmas que rondaban por el lugar,
pero nunca se imaginó que eran seres humanos que andaban debajo tierra.
Mientras tanto ya los rufianes habían llegado cerca de su objetivo y pronto se encontraban debajo
del almacén de discos, lugar donde hicieron un boquete en su suelo y salieron a
la superficie. Al observar detenidamente se dieron cuenta que se habían
equivocado de lugar, pero eso no fue impedimento para continuar con sus planes.
Inmediatamente abrieron un pequeño
horado y todos se introdujeron a la
joyería donde la saquearon completamente. Con esta inimaginable incursión habían
logrado cometer una hazaña delictiva
que posteriormente fue reseñada por la Prensa, tanto nacional como
internacional debido a la audacia sin límite de sus autores y que fue
considerada como lo más increíble en los anales de la historia policiaca del
mundo denominándolos LOS HOMBRES RATAS.
Una
vez que los propietarios de la joyería atracada pusieron la respectiva denuncia
y el Servicio de Investigación de la Policía, SIC., se hizo
cargo de inmediato de las pesquisas para dar con la identidad de los
autores, cómplices y encubridores para detenerlos y recuperar este gran botín.
¿Cómo se llegó a descubrir este sensacional atraco?. Una damisela conviviente
de uno de los ladrones exhibía una joya valiosa en su cuello, lo que trajo
comentarios que llegó a oídos de la Policía quien de inmediato empezó a
realizar seguimientos e investigaciones
y a la postre detener aquella mujer, quien al ser interrogada y no teniendo
como justificar la posesión de aquella alhaja de gran valor obligada por las
circunstancias delató a la banda de
pillos que habían cometido este delito. Entre sus principales delincuentes que la dirigían se
conoció que los principales sindicados
desarrollaban sus actividades como taxistas. Esta situación fue motivo
por el cual el SIC, solicitó la
cooperación del Departamento de CAPTURADORES, al mando del teniente MARIO
LAMOTA RIVAS, el mismo que dispuso una
prolija investigación por parte de este personal. Realizadas éstas se
logró en primera instancia ubicarlos por una razón, sus actividades la desarrollaban en el muelle municipal 4
como choferes. Revisando el archivo
de este Departamento de los conductores que tenían cuentas
pendientes con la justicia se pudo constatar por medio de sus fotografías que
las mismas correspondían a los hermanos
CAPUCHINAS, principales sindicados como autores del denominado ROBO DEL SIGLO.
Realizado todo este trabajo de cooperación, se elaboró el respectivo informe el cual fue enviado al
SIC.
UN
CRIMEN MACABRO Y TENEBROSO QUE CONMOVIO A LA CIUDAD DE GUAYAQUIL, FUE LA MUERTE
HORRENDA DE UN JOVEN DE LLAMADO LUDOVICO COOPIANO
En
las postrimerías del año de 1964, la colectividad Guayaquileña fue conmovida
por la desaparición de un joven apuesto y bien parecido, de origen manabita,
llamado LUDOVICO COOPIANO. Por este extraño suceso la prensa de la época le dio
gran cobertura. Como es de ley intervino en las pesquisas el desaparecido Servicio de Investigación
Criminal, SIC., para dar con el paradero del infortunado joven. Pese a las
investigaciones realizadas no se podía localizar al desaparecido. Por esta
razón se pidió la ayuda de la OIAT que estaba comandada por su jefe, el
Teniente, MARIO LAMOTA RIVAS. Se inician las investigaciones entre bastidores apoyando
a la Policía. Ambos grupos de
investigaciones funden su esfuerzo y capacidad para establecer su paradero.
Días
posteriores, después de una intensa búsqueda de parte de la Policía y la OIAT
se dio con el hallazgo de un cadáver abandonado, que se encontraba al fondo de
una cantera, ubicada al suroeste de la ciudad. Llamó la atención sobremanera a
los dos grupos policiales, por cuanto era visible que su cuerpo había sido
incinerado y cubierto de aceite quemado de vehículo, hecho cometido por desconocidos
criminales en su afán e intención de que
no se lo identifique, ya que sus huellas digitales estaban quemadas. Se tuvo que recurrir a
equipos especiales de la época para lograr su identidad. Por intermedio de su
dentadura fue posible establecer la identidad de aquel cuerpo y se estableció
que pertenecía a LUDOVICO COOPIANO.
Ahora venía la tarea y el paso más difícil. Establecer la identidad de los
autores materiales, cómplices y encubridores e intelectuales de este horrendo
crimen. Para ambas escuadras investigadoras era un verdadero dolor de cabeza.
Atrapados en este verdadero rompecabezas, de repente al Teniente Mario Lamota,
le llegó un dato muy importante al cual se le siguió el hilo hasta poder
encontrar su ovillo. El pajarito revelador indicaba que el joven asesinado
frecuentaba lugares donde asistían damas hermosas y de alto linaje, hombres de
negocios de mucha solvencia económica y encumbrados políticos de la época,
perteneciente a la clase alta guayaquileña, al” haig Laig” como se dice. Se
conoció reservadamente las identidades de estos personajes. Con esta valiosa
fuente de información se montó una severa vigilancia de 24 horas. Poco después
se establecía el lugar donde fue asesinado el joven LUDOVICO COOPIANO, recinto
que fue allanado por la policía y la OIAT. Como resultado de los
interrogatorios hechos a las personas encargadas de este lugar, se llegó a
conocer que aquí era frecuente realizar francachelas de conocidas personas del
sexo masculino, damas y homosexuales de esta ciudad, donde abundaba el alcohol
y droga terminando en grandes orgías y lujurias. Después de severas investigaciones se estableció
que LUDOVICO fue ultimado por celos. Es
que a este joven se lo disputaban mujeres y maricas. En el informe elevado a
las respectivas autoridades, como es el juez penal, todo fue archivado por la
razón de que el occiso era de condición pobre y quienes actuaron tenían dinero,
alta posición social e influencia en el orden político. Total todo quedó a
fojas cero y el caso fue cerrado y archivado.
Por este sonado crimen, cuando algo similar ocurría y quedaba en la impunidad, se decía caso
LUDOVICO en son de burla.
ASALTO A LOS ALMACENES
ISAIAS
Cerca
de finalizar el año de 1964, poco después del sonado crimen de LUDOVICO
COPPIANO, Aparece en escena otro suceso que alarmó a la colectividad
guayaquileña. Los almacenes ISAIAS situados en las calles Chile y 10 de Agosto,
frente a la actual Biblioteca Municipal, fueron atracados por un grupo de
antisociales, en el cual resultó muerto uno de sus propietarios. Por este
lamentable hecho delictivo, EL Servicio de Investigación Criminal.(SIC) del
Guayas solicitó la cooperación del
teniente MARIO LAMOTA RIVAS, jefe de la OIAT. Se Iniciaron las investigaciones respectivas junto a un
grupo selecto de este departamento, como los finados sargento Germán Soriano
Soberón y el cabo Pablo Suárez Hurtares. Realizadas las indagaciones respetivas
se logró establecer la total identidad de sus autores, por cuanto uno de sus
complotados llamado CANDIA NEPITA era conocido por sus antecedentes en esta
oficina. Este fue el ovillo para llegar al resto de compinches. También se
estableció que uno de los empleados de mayor confianza de los propietario de
este local comercial, que era de apellido Cevallos, joven perteneciente a la
clase media alta de esta ciudad, fue quien planificó el robo que derivó en la
trágica muerte de un miembro de la familia ISAIAS y por lo tanto resultó ser su
autor material.
CASO DE OLVIDO SUSCITADO A
MILITARES EN GUAYAQUIL
En
el año de 1964, cuando el país estaba gobernado por una Junta Militar de
Gobierno que la presidía el Contralmirante Ramón Castro Jijón, por razones
estrictamente militares y de logísticas se dispuso el traslado del Alto Mando
Militar desde Quito hacia Guayaquil. Al siguiente día una vez terminadas sus actividades que los
trajo a esta ciudad, deciden retornar a
la capital. A las 6 de una mañana fría de verano, al pie de la Zona Militar
ubicada en 9 de Octubre y Lorenzo de Garaycoa, tomaron un taxi, y en primera
instancia guardaron en su porta maleta su equipaje, done iba un maletín
mediano. Rápidamente lo abordaron y le indicaron al conductor que los lleve
aprisa hasta el aeropuerto Simón Bolívar. Se desconocen los motivos por los
cuales estos altos Oficiales tomaron un vehículo de servicio público en vez de
hacerlo en un carro militar. Aquí viene el problema. Al llegar a la terminal
aérea, se cree que tal vez por el apuro
y las preocupaciones toman apresuradamente el avión y se olvidan del equipaje. Al llegar a Quito
se dan cuenta de este grave error olvidadizo, muy preocupante por cierto. En él
iban guardados documentos muy importantes que eran inherentes al régimen
militar. Siendo las 7 de la mañana de ese mismo día y por intermedio de los
canales respectivos de mando militar, comunican de manera reservada al Jefe de
la Segunda Zona Militar de Guayaquil, Coronel Alfredo Molina Arroyo, dándole a
conocer esta desagradable novedad. Este alto Oficial en vez de llamar al
Comandante del Regimiento Guayaquil,
para que oficie a la antigua OID., Oficina de Delitos de la Policía Nacional y
se haga cargo de las investigaciones de su búsqueda y recuperación, no lo hace
sino que llamó al Presidente de la CTG., capitán del ejército Alfredo Suárez Guerrón, a quien le hace conocer estos
pormenores y le ordena que tome las medidas pertinentes sobre lo ocurrido. A
las ocho de la mañana lo llaman al domicilio del teniente Mario Lamota, jefe de
OIAT., a quien le comunican esta novedad. De inmediato, toma la camioneta a su
orden que era una camioneta, color verde del año 50, conducida por el
vigilante-chofer Alfredo Albuja Santillán.
se dirige a su oficina donde era esperado por todo el personal para
iniciar un nuevo día de actividades. Hace cerrar sus puertas y ordena que
nadie, entre, ni salga. De manera
apresurada dispone que el sargento
Germán Soriano Soberón forme a los
grupos, de Capturadores e investigadores. Una vez alienados correctamente les hace conocer sobre una novedad con trasfondo militar. Y con palabras
de preocupación que se le notaba en su rostro, manifestó. Señores, les pido
muchas reservas de lo que voy a exponerles. En primer lugar les solicito
que desde este momento dejen de realizar
los trabajos concernientes que atañen a este Departamento. Hay una razón muy
poderosa. Con mucha responsabilidad preferente al departamento que dirijo, he
recibido una orden del gobierno militar
en el sentido de que localice al término a la distancia un maletín que se les
olvidó a los miembros del Alto Mando Militar de este régimen cuando tomaron esta
misma mañana un taxi para dirigirse al aeropuerto Simón Bolívar y de ahí a la
ciudad capital. Algunos de los presentes inquirieron los datos y
características del vehículo así como de su conductor. A estas preguntas e
inquietudes respondió tajantemente. Las
únicas señales e indicios que se me ha hecho conocer son: El vehículo es un
taxi, de color marrón y nuevo, pero debemos tomar en cuenta una característica
muy especial, su conductor es un tanto calvo. No hay otra cosa que agregar.
Para concluir indicó. Señores clases y vigilantes en estos momentos nos estamos
jugando el todo por el todo y paralelamente el buen prestigio de esta oficina
que se ha ganado la total confianza de la ciudadanía y debemos estar orgullosos
de que se nos ha escogido exclusivamente a nosotros de manera reservada, sin
haber tomado en cuenta al servicio de Inteligencia militar, ni a la Oficina de
Investigación de la Policía Nacional. Es una misión de vida o muerte. Señores a
trabajar de manera consciente. La razón es que hay mucha eficiencia en nuestros trabajos en todos los campos de
investigación. De inmediato el personal salió muy confortado por las arengas
recibidas a cumplir esta difícil misión.
10 DE LA MAÑANA DEL MISMO
DIA EL VEHICULO ES LOCALIZADO
Después
de haber recorrido algunos lugares periféricos de la ciudad en el cumplimiento
de esta orden, siendo las 10 de la mañana, en circunstancias que mi persona
caminaba por la calle Vélez y 6 de Marzo, buscando al vehículo y chofer con
estas características, frente al parque Centenario me llamó la atención un taxi
medio vetusto que transitaba por este lugar
versión contraria a la información de los altos Jefes Militares quienes
indicaron que el vehículo era nuevo, que
circulaba por Vélez de Oeste a Este, pero lo que me llamó la atención fue la
fisonomía de su conductor, era de edad adulta un tanto avanzada y su cabeza era
calva por completo. Por un instinto de apreciación le hice señal que se
detenga. Se estacionó a la derecha. Me acerqué y muy cortésmente lo saludé con
buenos días. Lo abordé con esa confianza de que me encontraba con la persona
que buscaba, acertaba o fallaba. Le solicité su licencia de manejo y de
inmediato me subí a su coche y sin explicarle mi actitud, le dije que me
acompañe a la prevención del cuartel de tránsito. Me jugó la suerte. El hombre
se asustó y me dijo. Ah señor vigilante, si usted me quiere llevar al cuartel
debe ser por un maletín que se le olvidó a unos militares esta mañana en el
aeropuerto, está ahí en el porta maleta. Reprimiendo mi emoción y no darle a
notar al conductor en el sentido que la misión de búsqueda había culminado con
éxito, le manifesté que se dirija a la OIAT., donde procedí a darle parte al
teniente Mario Lamota. Luego llamó al
capitán Suárez Guerrón quien llevó el encontrado maletín hasta la Segunda Zona
Militar. El Departamento de la OIAT, con su jefe a la cabeza y extensiva a todo su personal,
fue felicitado efusivamente por la Junta Militar de Gobierno, en el sentido de
que en pocas horas y de manera eficiente se había logrado localizar y recuperar
documentos tan importantes. Este trabajo
exitoso se trasmitió en la orden general del día a todos los cuarteles y
destacamentos militares del país, dando a conocer esta gran hazaña. La OIAT
volvió a dejar bien sentado su buen n nombre y prestigio al resolver con toda
su capacidad y trabajo investigativo este nuevo caso.
RECUPERACION DE JOYAS
Casi
en esa misma fecha, La señora madre del Contralmirante RAMON CASTRO JIJON,
Presidente de la Junta Militar de Gobierno, de esa época, en unión de familiares suyos, en horas de la
noche, tomo un taxi en el barrio Orellana para dirigirse a cumplir diligencias
a otro lugar de la ciudad. Pero es el caso que al llegar a su destino se les
olvidó en el asiento trasero un fuerte alijo de joyas de oro gran valor. De
inmediato toda esta familia se dirigió a la OIAT., donde dio parte de este
caso. Al preguntársele por el color o la marca del carro y fisonomía del
chofer, indicaron que era un carro pequeño, pero no se dieron cuenta con
exactitud de su color. El único dato que dieron y todos coincidían de que el
conductor era un poco bajo de estatura, trigueño y de pelo zambo. Por este caso, de inmediato el capitán Lamota convocó a un grupo de Capturadores
para que se haga cargo de esta investigación. A las dos horas, el cabo ANGEL
QUIROZA YEPEZ, especialista en estos menesteres, localizó un vehículo
sospechoso en el cual coincidían la fisonomía del chofer. Fue llevado a la
OIAT., donde su jefe lo interrogó reservadamente, pero el aludido negó rotundamente
haber hecho alguna carrera a familia alguna y peor haber encontrado tales joyas
en su carro. Por esta razón se localizó de manera urgente a la familia
perjudicada, quien asistió de inmediato hasta la oficina. Al llegar fue
presentado el conductor y carro, manifestando todos al unísono que era el mismo
vehículo y chofer. Se le conminó a que devuelva lo olvidado, pero el chofer de
una manera audaz negaba y negaba haberlas tomado como pasajeras. Para
persuadirlo a que diga la verdad, la señora se identificó como mamá del
Contralmirante Ramón Castro Jijón y que si las devolvía sería bien recompensado
y gratificado e inclusive le conseguiría un buen trabajo en el gobierno, a él o
a cualquier familiar. El aludido siguió empecinado a seguir negando y negando.
Como no había forma de que diga la verdad se llamó a la OID., y al rato
estuvieron varios agentes de esta dependencia investigativa quienes se lo
llevaron. Después se supo que en el interrogatorio a que iba ser sometido se le
indicó que si no decía la verdad sería
guindado por los pulgares, al ver este suplicio que le esperaba, de
inmediato cantó la verdad. A los investigadores, tanto de la OIAT., como de la
OID., los llevó hasta su casa y los condujo hasta su jardín, donde procedió a
sacar las joyas que las había enterrado subrepticiamente. Como fue hallado
culpable de este delito de robo purgó algunos años en la Penitenciaria del
Litoral.
MUERTE EN LAS PARALELAS
DEL FERROCARRIL
La
OIAT., recibió un oficio de un Juez Penal, en aquellos años no había todavía
Jueces de Tránsito, con la finalidad de que se investigue el atropello y muerte
de un hombre desconocido que fue arrollado por un ferrocarril en Bucay. El
capitán Mario Lamota Rivas designó a mi persona para que me haga cargo de las
pesquisas respectivas. Para tal cometido me trasladé hasta dicha población. Mi
primera diligencia fue localizar al conductor de la locomotora que se indicaba
en el parte. Interrogado que fue, manifestó lo siguiente. Que una noche del mes
de abril que no recuerda con exactitud su fecha, más o menos a las ocho de la
noche conducía el tren que hace el itinerario Guayaquil-Bucay, y cuando se acercaba a este último lugar, al
tomar una curva pronunciada, de repente con los fuertes y potentes faros de su
máquina pudo divisar a lo lejos un bulto que estaba en las rieles. Fue frenando
poco a poco y haciendo uso de los pitos y sirena avanzaba raudamente por cuanto
no podía detenerse bruscamente. Estando más cerca pudo cerciorarse de que se
trataba de un cuerpo humano. Pensó al momento que podría haber sido alguna
persona ebria que se había quedado dormida. Por más que aplicó los frenos no
pudo evitar arrollarlo, por lo que el pesado tren le pasó por encima
triturándolo por completo. Más adelante detuvo la marcha con la finalidad de observar
de cerca este lamentable accidente. Así mismo se bajaron todos los ocupantes
del ferrocarril quienes se quedaron horrorizados al ver este espectáculo
dantesco. Ratos después estuvo el vigilante del destacamento de tránsito de
Bucay quien levantó el respectivo parte. Fui conminado a presentarme ante las
autoridades respectivas. Posteriormente con la finalidad de deslindar
responsabilidades. Además se consideró
que no era culpa mía. Prosiguiendo en las investigaciones, interrogué al
vigilante de tránsito que actuó en este caso, el cabo Rigoberto Barragán, quien
me hizo conocer un dato reservado muy importante, pero había que verificarlo.
Que había sido un crimen. El mismo indicaba que el muerto en verdad no lo mató
el tren. Su cuerpo sin vida fue arrojado a las paralelas para hacer creer que
había sido un arrollamiento. Que este rumor se daba a soto voces en la
población, pero nadie se atrevía hablar por temor a represalias. Dándome nombres de personas que podrían
corroborar este aserto, arriesgándome procedí por aquí y por allá a
interrogarlos y éstos solicitando de que no los mencione, me informaron con
punto y coma los nombres de quienes lo habían asesinado en otro lugar y quienes posteriormente lo arrojaron a las
rieles para que este crimen quede en la impunidad. Una vez establecida la
identidad de los autores, cómplices y encubridores de este horrendo crimen,
hasta aquí limite mi actuación. Con fecha 6 de mayo de 1965 eleve el parte
respectivo al Jefe de la OIAT, quien mediante oficio lo remitió al juez
respectivo que lo solicitó. Días después personal de investigación de la OID.,
se trasladó a Bucay donde procedió a la captura de todos los implicados
mencionados en el parte respectivo. Todos estos excelentes resultados, se establecieron gracias a la acuciosidad llevada a cabo dentro de las
pesquisas realizadas por el suscrito.
LICENCIAS FALSIFICADAS
Por
esta misma época empezaron a correr rumores de que se estaban emitiendo
licencias falsas y que personas incapacitadas, como cobradores de buses y
colectivos las habían adquirido sin asistir a ningún curso. Pero lo que
corroboró estos rumores se dio cuando un ciudadano que era curco y que
anteriormente era cobrador de colectivos, se lo veía orondamente conduciendo un
pesado transporte urbano al cual no estaba apto ni autorizado por su
incapacidad física. Esta situación anómala llamó la atención sobremanera al cabo PABLO SUAREZ HURTAREZ, investigador
de la OIAT., quien procede de inmediato a llevarlo ante el capitán Mario
Lamota. Hechas las investigaciones pertinentes sobre este delicado caso, el
ciudadano curco, dio santo y seña de cómo había adquirido su credencial de manejo. Indicó que la obtuvo en el
Sindicato de Choferes de la ciudad de Ambato sin curso de ninguna clase, a
cambio de una fuerte cantidad de dinero. Que el intermediario principal para
obtenerla, era el conocido corredor de carros, LUIS LOCO LARREA, quien era
Comisario de Tránsito en la capital Tungurahuense. Al enterarse de que este ilícito se
había descubierto, se dio las de Villadiego, puso los pies en
polvorosa y anduvo bastante tiempo por los techos. Para verificar si en verdad
eran auténticos o falsificados estos documentos, un personal de la OIAT., al
mando de su Jefe, se trasladó a la ciudad de Quito, y en la Dirección General
de Tránsito se comprobó que no estaban asentadas como legal. Por lo tanto eran
falsificadas. Descubierta esta gran red
de falsificadores, se inició un operativo gigantesco con la finalidad de
decomisar estas credenciales falsas y capturar a sus autores, cómplices y
encubridores. Aquí en Guayaquil se decomisaron cientos y algunos de sus
poseedores fueron a las mazmorras de la vieja cárcel municipal. Se verificó en esta campaña que se habían
emitido por miles a nivel nacional. La OIAT., para cumplir su total
cometido, el capitán Mario Lamota, viajó
a Portoviejo, Babahoyo y Ambato a investigar a fondo este affaire que fue un
escándalo más por el año 1965 y que fue descubierto por el emblemático
Departamento de la imparable OIAT.
MUERTE DEL CABO SAQUISELA
EN EL CANTON VELASCO IBARRA, ANTES LLAMADO EMPALME
Era
una madrugada fría y oscura de un día de verano del año 1967. El cabo Enrique
Saquisela perteneciente al destacamento de tránsito del cantón Velasco Ibarra,
fue designado a realizar su servicio a la salida de esta población con
dirección a la ciudad de Quevedo. La consigna era de que tenía que impedir que
toda clase de vehículos utilicen la vía Empalme-Quevedo por cuanto estaba en
construcción y al transitar obstaculizaba los trabajos. Los carros tenían que
tomar la ruta Empalme- parroquia Guayas, cuya vía era un tormento porque estaba
sin pavimentar y era una polvareda y el trayecto se hacía más pesado y largo.
Era un suplicio total. Por esta razón los choferes trataban y evitaban
utilizarla. Para hacer cumplir esta molestosa y riesgosa tarea, eran designados
vigilantes por turno para hacerla cumplir. Aquella fatídica madrugada, el
conductor de un pesado camión plataforma quiso evadir este control. El cabo
Saquisela trató de impedirle y se puso al frente de aquel vehículo y
enérgicamente le solicitó al chofer que retroceda y tome la ruta,
Empalme-Guayas. Este no le hizo caso y enfurecido y en un caso criminal sin
precedentes, le lanzó el pesado camión matándolo de contado. Cometido este
execrable y perverso asesinato se dio a la fuga con rumbo desconocido. Una vez
que la OIAT se hizo cargo de las investigaciones, un personal de esta Oficina
se trasladó hasta el cantón Velasco Ibarra, donde previo las pesquisas
realizadas y los debidos interrogatorios a quienes conocían esta fatal caso, se
estableció la identidad del autor de este lamentable hecho. Por otros indicios
se supo que este desalmado conductor había huido con su vehículo con dirección
a la parroquia Guayas. Este mismo personal le siguió los pasos hasta el lugar
mencionado, no logrando su aprehensión por cuanto se había refundido en las
altas y boscosas montañas de esta región. Se esfumó por completo.
ATROPELLO Y MUERTE DEL
MOTOCICLISTA CARLOS VILLACRES VILLALONGA Y RESULTO HERIDO EL CABO ENRIQUE
ESTRELLA VILLACIS.
·
El
26 de Julio de 1970, los motociclistas CARLOS VILLACRES VILLALONGA Y ENRIQUE
ESTRELLA VILLACIS, fueron designados escoltas de la reina de Guayaquil por
disposición de la Comandancia. Al término del desfile de ese día que lo
presidía la bella dama representante de la ciudad que recorría varias calles de
la ciudad, sus organizadores dispusieron que los mencionados Agentes de
Tránsito se retiraron a sus domicilios con la finalidad de almorzar. De regreso
a sus labores de escolta utilizando una sola moto los dos, Carlos Villacrés
Villalonga conduciéndola circulaba por la calle Argentina, al llegar a 6 de Marzo, observaron que tenían vía libre
y reiniciaron su marcha, y cuando habían pasado más de la mitad de la cuadra de
6 de Marzo, aparece de improviso un colectivo de la línea 11 y su irresponsable
conductor que venía a exceso de velocidad incontrolable impacto de frente a la
motocicleta quedando debajo del colectivo CARLOS VILLACRES VILLALONGA, muriendo
de contado. En cuanto a su acompañante ENRIQUE ESTRELLA VILLACIS, también
recibió un fuerte impacto en su pierna izquierda la que posteriormente en la
clínica del Seguro Social donde fue llevado se le fue amputada. Como es usual
en estos casos el chofer huyó con rumbo desconocido. Posteriormente la OIAT se hizo cargo de las investigaciones para
establecer la identidad del conductor causante de este horrendo accidente de
tránsito. El informe que se emitió al
juez respectivo concluía que quien conducía el colectivo de la línea 11 al
momento del accidente en las calles 6 de Marzo y Argentina, llama LUIS DUTAN
ORDOÑEZ, Licencia número 100 de Cañar y actualmente se encuentra prófugo. Por
tal motivo la autoridad competente dispuso su localización y captura. Previas
exhaustivas pesquisas efectuadas por el
personal de la OIAT., se llegó a conocer que este conductor se encontraba
escondido en una casa de la ciudad de Quevedo. El capitán MARIO ALFONSO LAMOTA
RIVAS, previa la autorización del Jefe de Tránsito, Comandante Martín Riera
Vargas, armó un operativo y dentro del mismo escoge a un personal subalterno preparado en estos
menesteres. Estudiado a fondo las acciones a tomar. Todos vestidos de civil
salen con rumbo a su objetivo en las primeras horas de la noche un mes después
del trágico accidente, el mismo que iba comandado por su jefe y asistido
por el Sargento Pablo Suárez Hurtares. Junto con todos estos elementos
humanos se dirigen hacia aquella ciudad
fluminense con la finalidad de capturarlo. Preparado el operativo de
aprehensión con mucha cautela y seguridad, llegaron hasta el domicilio indicado
y se procedió a rodearlo de manera sigilosa y discreta. Cuando se procedía
allanarlo, de repente aparecen una gran cantidad de personas en el teatro de
los acontecimientos, quienes obstaculizaron esta labor impidiendo que se
continúe este operativo, por lo cual no pudo llevarse a cabo esta captura.
Quien dirigía esta turba de revoltosos era el Secretario General del Sindicato de Choferes de Quevedo, de
apellido Gallo, acompañado de choferes agremiados a esa institución
sindicalista. En ese momento por la acción de captura que se estaba llevando a
cabo, se formó un tremendo alboroto que escandalizó a la barriada de esa
ciudad quienes también se opusieron a la
aprensión coadyuvando que se eche al
traste esta captura, situación confusa que aprovechó el chofer Luis Dután Ordoñez para desaparecer del lugar en complicidad de
algunos choferes compañeros suyos. Negativamente quedó malogrado y frustrado
todo lo planeado por el personal de la OIAT
que no le pudo echar el guante a este irresponsable chofer para que
responda por este fatal accidente de tránsito.
·
LA
ODISEA QUE LE HA TOCADO PADECER EN EL PRESENTE CASO EL EXCABO MOTOCICLISTA
ENRIQUE ESTRELLA VILLACIS DESPUES DE ESTE MALOGRADO ACCIDENTE DE TRANSITO, EN
CUANTO AL RECLAMO DE SUS DERECHOS QUE LE CORRESPONDEN LOS MISMOS QUE LE HAN
SIDO VULNERADOS.
En
la presente narrativa queremos puntualizar la dramática historia que le ha
tocado afrontar desde que le ocurrió este lamentable accidente, al agraviado,
EXCABO ENRIQUE ESTRELLA VILLACIS. Toda esta información referente a su
desdichado caso, lo hace apoyado con documentos probatorios y verbalmente
manifiesta lo siguiente Posterior
al funesto día que ocurrió este
lamentable accidente, pasó a engrosar las filas de los discapacitados, tanto en
su vida cotidiana, como en la Institución de Tránsito como un miembro activo
más. Debido a su invalidez la Superioridad de Tránsito lo designó a que preste
servicio como ayudante en el Departamento de Placas y Bicicletas, ubicado en la
calle Brasil y Chile y el cual estaba hecho cargo como jefe, el Sargento GERMAN
SORIANO SOBERON. Estando en estas labores, se acercó una persona que no se
identificó y era visible que estaba con síntomas de haber ingerido licor, quien
le manifestó en tono autoritario, áspero y grosero que le vaya a sacar las
placas de su carro por cuanto quería ponerles las nuevas. A pesar de estas
expresiones altaneras le manifestó que por disposiciones internas superiores,
el propietario del vehículo tenía la obligación de traer las placas a este
Departamento para proceder a entregarles las nuevas. Al escuchar esta respuesta
tomó actitudes agresivas indicando que
no iba a cumplir con este requerimiento seguía insistiendo que vayan a
sacarles las placas viejas como se le volvió a
negar tal pedido, este individuo se alteró para de inmediato dirigirse
hasta donde el sargento GERMAN SORIANO, quien también le hizo conocer aquella
disposición motivo por el cual lo
agredió físicamente en el rostro.
Luego de este provocado incidente se llamó al personal de la guardia de
prevención llevándolo detenido. En este lugar es que recién se identifica como
DANILO EGRED Alférez de Fragata de la Armada Nacional. Luego se comunicó con el
Director Ejecutivo, cuyo titular era el Teniente de Fragata CARLOS ALCIVAR
MURRIAGUI, quien bajó de inmediato y ordenó que todo el personal de Placas Y
Bicicletas se presenten ante su persona. Concurrieron. El agredido sargento
GERMÁN SORIANO SOBERON, ENRIQUE ESTRELLA VILLACIS y el cabo GUILLERMO BENAVIDES.
Acusándolos de haber faltado el respeto y agredir a su compañero de armas,
furibundo ordenó que sean llevados
detenidos a la Primera Zona Naval los dos primeros nombrados. En este
recinto militar fueron interrogados por el Contralmirante ORTEGA ORTEGA, quien
no encontró ninguna prueba de culpabilidad y por esta razón dispuso que
retornen a sus labores normales. Pero al siguiente día, el Director Ejecutivo
ALCIVAR M., ordenó que sean llevados al calabozo sin ninguna justificación
donde al cabo de 30 días de estar recluidos fueron dados de baja sin lugar a ninguna defensa. Con estas
acciones DESCALIFICABLES se cometió uno de LOS ABUSOS Y ATROPELLOS MAS
INJUSTIFICABLES E ILEGALES que se
dio en aquella época en que el país
estaba gobernado por una Junta Militar que la presidía el general: GUILLERMO
RODRIGUEZ LARA. Con esta actitud violatoria a los DERECHOS HUMANOS se cierra un capítulo más en la
trajinada existencia azarosa y oscura
que le ha tocado vivir el ex cabo ENRIQUE ESTRELLA VILLACIS. Ya en la vida civil
teniendo esta visible dificultad se
dedicó a reclamar sus derechos que por ley le corresponde como es normal en
estos duros trances. En su penoso y largo peregrinar por los Tribunales de
Justicia solicitando que se le reconozca la respectiva indemnización que le
asiste, le ha sido negada reiteradamente por los funcionarios de turno que
estuvieron en la obligación de hacerlo,
quienes adoptando actitudes deshumanizadas y prepotencia, y aduciendo fútiles
pretextos que no tienen asidero legal le han echado la puerta por sus narices
cerrando toda posibilidad de solucionar su justo reclamo. En su denuncia hace
hincapié que algunos de estos funcionarios irrespetuosos que se negaron
atenderlo, lamentablemente se encuentran
algunos ex_ Directores Ejecutivos de la COMISON DE TRANSITO DEL GUAYAS,
quienes a pesar de que el Tribunal de lo Contencioso y Administrativo disponía
que se le reconozca lo que por justicia y derecho le correspondía cerraron toda posibilidad de acatar tal
disposición. Por otro lado en su largo trajinar y vía crucis, yendo de Herodes a Pilatos, guarda una inolvidable
gratitud al señor Ingeniero EUSTORGIO MENDOZA CUBILLO y al señor ANTONIO
ANDRETTA ARIZAGA quienes como
Presidentes de la Comisión de Tránsito del Guayas en el gobierno de Gustavo
Noboa dispusieron que se le reconozca sus reclamos, pero el ex_ Director Ejecutivo de aquella época, el
Ab. ROBERTO POLIT ROBINSON, se opuso
tenazmente hacerlo, manifestando que mientras él esté en funciones no le dará trámite a su
pedido. Para manifestar esta aseveración él tiene documentos probatorios que
pueden ser examinados por cualquier Autoridad o ciudadano. Prosiguiendo en este
penoso caso hay que tomar muy en cuenta que existe el antecedente
probatorio que el ex cabo ENRIQUE
ESTRELLA VILLACIS, sufrió este malogrado percance en horas laborables de su
trabajo como motociclista de la Institución de Tránsito, ya que en los
instantes en que ocurrió dicho accidente de tránsito desempeñaba las funciones
de escolta de la Reina de Guayaquil de aquella época.
En
otro ámbito sobre este mismo contexto, hay que resaltar que el ex cabo ENRIQUE
ESTRELLA VILLACIS, una vez fuera de la institución a la que sirvió con honor,
trabajo, honestidad, lealtad y patriotismo ha puesto en alto el buen nombre de
la COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS Y DE SU PAIS ECUADOR. Como campeón nacional
en el deporte del Fisicoculturismo, su persona se ha paseado por algunos países
del continente americano y Europa como son: La ciudad de México, donde se
llevaron a cabo los Juegos Panamericanos, quedando en cuarto lugar. En Canadá,
cuarto lugar en el mundo. Londres. Como entrenador logró dos campeones
mundiales. Brasil: campeón Panamericano en su especialidad Fuerza en banco. Por
estas proezas deportivas ha obtenido
algunos títulos, galardones, medallas y trofeos internacionales, para orgullo
de sus conciudadanos a la cual me sumo.
CASO
ATROPELLO Y MUERTE DE UN MENOR EN SANTA LUCIA
PARA INVESTIGACION SE LO
DENOMINO CASO SANTA RITA.
A
las nueve de una mañana fría y brumosa del 15 de septiembre de 1964, ocurrió un
fatal atropello y muerte de un menor,
cerca de un puente a la entrada de esta
población. Cuando hizo acto de presencia un cabo de apellido Zambrano que se
encontraba en el destacamento de Palestina, quien actualmente reside en los
Estados Unidos, actuó de inmediato y al recabar los datos correspondientes le
informaron algunos residentes de esta población que estuvieron cerca de este
malogrado percance, que el causante de este lamentable accidente de tránsito,
era el conductor de un camión plataforma cargado de plátano llamado MIGUELITO No.
8. Así lo consignó en el Parte respectivo que elevó a la jefatura de Tránsito.
Como es usual en estos casos, el Juez de turno sindicó al citado conductor y
dispuso su prisión preventiva para las investigaciones de rigor. Como
referencia, el mismo día de este lamentable percance, que era domingo, el
abogado del presunto conductor causante del accidente concurrió a la oficina
del Jefe de la OIAT, CAPITÁN MARIO LAMOTA RIVAS para solicitarle que se
traslade al lugar de los hechos con la finalidad de probar de que su defendido
no era a quien sindicaban en el Parte informativo. Me recuerdo que yo viaje
junto a mi Jefe y el jurisconsulto hasta Santa Lucía para realizar las debidas
investigaciones. Aquel día interrogando a los parroquianos que podrían dar
algún indicio sobre el verdadero culpable no se logró establecer lo contrario y
por lo tanto el aludido chofer seguía siendo el autor de este trágico
accidente.
EL
CONDUCTOR ALUDIDO COMO CAUSANTE DE ESTE FATAL ACCIDENTE DE TRANSITO, POR
INTERMEDIO DE SU ABOGADO NIEGA SER EL CAUSANTE.
Por
este motivo el Juez de Tránsito, conocedor de este caso, dispuso una exhaustiva
y prolija investigación para establecer al verdadero culpable de esta
lamentable desgracia, por cuanto el acusado negaba y negaba, aducía que era inocente
y no tenía nada que hacer y prácticamente se lo estaba involucrando
equivocadamente.
El
capitán MARIO LAMOTA RIVAS, jefe de la OIAT, con el respectivo oficio enviado
por la autoridad correspondiente, por intermedio del secretario de esta
oficina, el cabo ARMANDO LENIS AYALA se me designó para que me hago cargo da
esta enojosa investigación. Para tal cometido se me asignaron los viáticos
correspondientes para mi traslado hasta Santa Lucía. Llegado al lugar de los
hechos di inicio a mi trabajo investigativo. Desplegando una labor titánica por
cuanto había que localizar a una gran cantidad de testigos que constaban en el
Parte informativo que vivían fuera de esta población, los mismos en su versión
inicial habían dado versiones las cuales indicaban no saber nada ni haber visto
nada, se supone que por no involucrarse. Prosiguiendo en este duro trance y
difíciles menesteres, opté por presionar
un tanto aquellos testigos que los noté nerviosos y tartamudeando. Utilizando
una estratagema en el sentido de que serían llevados a declarar a Guayaquil
pude lograr que uno de ellos llamado
Porfirio Plúas, con un nerviosismo que
se le notaba me recibí un dato
interesante, indicándome que no lo involucre por temor a represalias. Que quien sabía toda la verdad sobre este caso
era un peón del señor Triviño, más conocido en los archivos policiales, como EL
LADRON DE LEVITA. Este llamaba Genaro Bajaña. Además me indicó que esta familia
era propietaria de la hacienda Barbasco que tenía una larga extensión desde
este lugar hasta Palestina y me previno que tenga cuidado y precaución. Con
este informe me dirigí hasta los predios de esta hacienda lugar donde me
recibió en primera instancia de manera cordial el mencionado Triviño y de
inmediato mantuve una entrevista .donde le expuse el motivo de mi visita y como
no podía ser de otra manera le indiqué que en este fatal accidente
presuntamente se estaba sindicando a un conductor que tal vez no tenía nada que
ver en aquella muerte. Le hice hincapié que un peón suyo el cual le di su
nombre había sido testigo presencial de este malogrado accidente y por lo tanto
sabía cuál era su verdadero causante. En primera instancia se negó tenazmente
hacerlo comparecer, aún más me solicitó que abandone su propiedad, pedido que
lo rechacé enérgicamente, no lo hice y por el contrario seguí insistiendo hasta
el puno que le manifesté que a su empleado lo llevaría con la fuerza pública,
sea con la Policía o. Al escuchar mis palabras de sometimiento cambió de
parecer su actitud y de inmediato mandó a buscar al trabajador aludido. Llegado
saludó muy cortésmente para de inmediato los tres dirigirnos a la oficina
privada de Triviño. En este pequeño recinto su
patrón le ordenó que diga la verdad sobre lo que el presenció al momento
del accidente. Empecé a interrogarlo y
sin presión de ninguna clase manifestó lo siguiente. Que el causante del
atropello y muerte del menor en referencia había sido un camión bananero que
llama SANTA RITA. Al camión plataforma le echaron la culpa por el motivo que
iba atrás del bananero en referencia. Que una vez cometido este hecho trágico
el conductor y vehículo se dieron a la fuga en dirección a Guayaquil. El error
del conductor del camión plataforma MIGUELITO NO. 8, fue detenerse en el sitio
del atropello. Recogida esta versión determinante le hice firmar esta
declaración para proseguir en mis investigaciones. Terminada mi misión en la
hacienda procedí a darles mis debidos agradecimientos, tanto al señor Triviño,
como a su trabajador y me retiré cordialmente del lugar.
Prosiguiendo
en mis investigaciones, ahora había que demostrar si era verdad la versión de
Genaro Bajaña. Para dilucidar este confuso accidente tenía que utilizar mi
verdadera sapiencia como investigador y para tal efecto contaba con un hecho
contundente que me daba la figura de un jugador de naipe hábil. Por lo tanto
tenía un AS bajo la manga. Y el mismo era el siguiente. Como en aquellos
tiempos todos los vehículos, tanto particulares, de alquiler, livianos y
pesados eran controlados en los Controles y Destacamentos de Tránsito, desde
Guayaquil hasta su destino, donde se les daba una hoja de ruta y se los
anotaba, tanto su pasada de ida y de vuelta. Lo que hay que resaltar que cuando
el control de salida de vehículos estaba en el llamado Km. 1, se disponía que un
vigilante se aposte en la carretera con toda precaución y donde existía una
palanca con la finalidad de que los vehículos livianos se detengan, donde se
procedía anotarlos, como son placas, nombres y números de licencia y su
destino. Con esta modalidad se continuó hasta cuando el control se trasladó
hasta el Km. 4.1/2. Con el tiempo cayó en desuso esta loable e importante
iniciativa y disposición. Prosiguiendo en las investigaciones en este caso había que investigar el trayecto
Guayaquil-Velasco Ibarra-(Empalme) y viceversa sobre el paso del camión
bananero SANTA RITA. Para establecer la verdad utilicé un patrón especial, el
cual era muy primordial. LA HORA de su paso por Palestina el cual era
determinante para dilucidar este problema. La misma tenía que coincidir con la hora que constaba en el Parte
informativo que elevó el vigilante Zambrano al momento del accidente en Santa
Lucía. Por lo tanto me trasladé de inmediato al Destacamento de Palestina,
lugar donde solicité al personal de este Control el listado del día del
accidente. Procedí a revisarlo minuciosamente, hasta que por fin apareció el
nombre del camión bananero llamado SANTA RITA, con todos los principales datos,
hora de salida, destino y principalmente el nombre de su conductor y su número de
licencia. Además su destino era el Puerto Marítimo de Guayaquil lugar donde iba
a descargar su carga de banano que lo trasladaba desde Quevedo. Cotejando la
hora de su paso por esta población hasta pasar por Santa Lucía, coincidía
presuntamente que en verdad este vehículo y su conductor serían los causantes
de este fatal accidente. Recogidas estas versiones, me trasladé de inmediato
hasta el siguiente Control donde debería pasar y anotarse que era NOBOL. En
este Destacamento revisando el listado de los vehículos que pasan por este
lugar, no constaba el paso del camión bananero SANTA RITA. Lo propio se hizo en
el Control de salida y entrada de Guayaquil, ubicado en el Kilómetro 4 ½.
Posteriormente me dirigí hasta el Puerto Marítimo y revisando los listados de
los camiones bananeros que tenían que descargar dicha fruta el día del
accidente, el SANTA RITA. Se había
desviado de su ruta y nunca llegó a su destino.
Hechas
todas estas exhaustivas y prolijas investigaciones se elevó el informe
correspondiente, donde se determinó que había grandes indicios de
responsabilidad del conductor del camión
bananero SANTA RITA. Así mismo quedó demostrada la inocencia del conductor del
camión plataforma Miguelito No. 8, de apellido CRUZ. Posteriormente a la presentación de este
informe, el propietario del camión bananero SANTA RITA contrató a un abogado
para que se haga cargo de la defensa de su chofer, así como voluntariamente
dispuso que su vehículo sea trasladado hasta los patios de retención de carros
de la Comisión de Tránsito en Guayaquil. Con estas sesudas investigaciones se
dio un epílogo satisfactorio en el cual se demostraba la inocencia de un
conductor que equivocadamente había sido involucrado en un hecho que nunca cometió.
Prosiguiendo
en los duros caminos que le tocó afrontar en las difíciles investigaciones que
se presentaban continuamente, tenemos que resaltar un caso parecido al del
camión bananero SANTA RITA, y es el siguiente. Este quedó en los archivos de la
OIAT., como el CASO CAMARADA ARCE.
El
camarada Arce, como se lo llamaba y conocía entre los choferes profesionales
que conducían colectivos del servicio urbano de Guayaquil. Yo lo ubicaba como
un señor de apariencia física delgada, entrado en años y siempre muy educado y
sonriente. A la sazón en la época en que
ocurrió el lamentable accidente que vamos a relatar, era conductor de un
colectivo de la línea urbana número 12, a la que apodaban la cinta verde, por
cuanto sus unidades tenían este color, junto al blanco.
EL TRAGICO ACCIDENTE
En
una mañana de un día de octubre de 1968, en las calles 9 de Octubre y Malecón
Simón Bolívar, un ciudadano fue atropellado por uno de los tantos colectivos
que circulaban por estas congestionadas arterias que a la postre le causó la
muerte. Como es usual en estos casos, el vigilante que actuó después de este
percance, valiéndose de testigos que se encontraban arremolinados al pie del
interfecto, tomó los procedimientos respectivos para elevar el Parte
informativo. Por versiones de muchas personas que dijeron estar en el lugar y
que habían presenciado el atropello, indicaban la placa de un colectivo de la
línea 12. De inmediato el Agente de Tránsito se dirigió hasta la estación de
estas unidades que estaba ubicada en el Km. 4 de la vía a Daule. En este lugar
averiguando al controlador de tiempo por el conductor de las placas que le
habían dado, le indicaron que llamaba Benito Arce Montero y le señalaron a un
señor que en esos momentos se estaba sirviendo el almuerzo. Luego de estas
informaciones, el camarada Arce fue detenido y conducido a los calabozos del
Cuartel de Tránsito, de las calles Chile y Cuenca, pese a su oposición y de
todos sus compañeros de labores indicaban que era inocente. Para concluir su trabajo el vigilante que
intervino en este accidente, involucró al camarada Arce, como el causante del
mismo en el Parte respectivo. Por lo sorpresivo de su detención, sus
familiares, entre ellos dos hijos que también eran choferes de colectivo
empezaron a realizar las gestiones para lograr su libertad aduciendo que su
padre no había cometido ningún atropello y muerte y tal es el caso que cuando
fue aprehendido se encontraba tranquilo en la estación terminal degustando su
comida. Cómo era posible que si en caso hubiera sido el culpable de tan
malograda acción se hubiera dado a la fuga y nunca hubiera llegado con la
tranquilidad que lo hizo hasta con el propio vehículo hasta su destino que era
la estación.
Ante
los reclamos que se hizo ante el Juez que le tocó conocer este accidente de
tránsito, esta Autoridad envió un oficio a la OIAT., en el cual solicitaba que
se realice una exhaustiva, minuciosa y prolija investigación urgentemente, para
determinar con exactitud la identidad del chofer que atropelló a una persona
que falleció a causa de este lamentable accidente suscitado en las calles 9 de
Octubre y Malecón, ya que en primera instancia se estaba acusando presuntamente
al conductor Benito Arce Montero, el cual negaba totalmente ser su autor.
El
sargento Armando Lenis Ayala, secretario de este Departamento procedió a
entregarle al capitán MARIO LAMOTA RIVAS
el oficio en referencia. De inmediato fui llamado por el jefe quien me encargó
este enredado caso y me previno que no sea otro Ludovico y que me ponga
atrabajar de inmediato por cuanto el pedido era urgente ya que supuestamente se
encontraba detenido un conductor que alegaba su inocencia. Tomado el caso, el
primer paso que hice fue dirigirme a la Jefatura de Tránsito donde me fue dada
una copia del Parte informativo sobre este caso. Leído que fue detenidamente, me encontré con un detalle muy
importantísimo. Uno de los testigos al cual lo anote en mi libreta de apuntes
indicaba que el colectivo causante del accidente era de color azul y blanco y
no verde y blanco al que conducía el camarada Arce. Prosiguiendo, luego me dirigí hasta el calabozo donde se
encontraba recluido el camarada Arce y dispuse que sea sacado y llevado con
todas las seguridades del caso hasta
nuestro departamento para ser investigado.
En
primer lugar dentro de su interrogatorio manifestó ser inocente ciento por
ciento, no tengo nada que ver, ni decir ni ocultar y me hizo hincapié en el
sentido de que si en caso él hubiera atropellado algún desaprensivo ciudadano,
lo primero que hubiera hecho es darse a la fuga y dejar el colectivo abandonado
y nunca llegar a la estación. Lógico le manifesté. En lo contrario al no tener
ninguna responsabilidad en lo que se me acusa llegué normalmente a dejar la
tarjeta y me fui a servir el almuerzo tranquilamente. Me replicó que no podía
ser tan audaz que después de cometer un atropello donde había un muerto iba a
regresar a mi destino. Usted sargento me conoce que soy una persona honesta y
responsable, que si yo hubiera sido el causante, me hubiera entregado de
inmediato. En verdad tomé en consideración estas expresiones y en primera
instancia me hizo dudar de su culpabilidad ya
que presuntamente me decía la verdad. Aún más cuando había una versión
de un testigo que decía de otro color del vehículo que conducía el causante de
este hecho. Por eso le manifesté que me comprometía a emplear toda mi capacidad
investigativa, así sea que tenga que trabajar día y noche hasta dar con la
identidad del verdadero culpable. Para mis adentros me dije, seguiría el mismo
patrón y modelo que utilice en el caso
del camión bananero SANTA RITA. LA LISTA DE TIEMPO DE SALIDAD Y ENTRADA DE LOS
GRUPOS DE COLECTIVOS QUE CIRCULAN POR 9 DE OCTUBRE Y MALECON. Para tal efecto
me dirigí a entrevistar al testigo que dio la versión sobre el color del
colectivo. Lo encontré en su domicilio y le indiqué el motivo de mi visita. Me
atendió muy cordialmente y razón por la cual lo invité que me acompañe a la
OIAT., con la finalidad de que rinda una declaración sobre este hecho.
Efectivamente nos dirigimos a este departamento donde me informó todo lo
relacionado a lo que observó el día de percance. Comenzó su relato que aquel
día del accidente se dirigía a una Institución bancaria de ese sector y por lo
tanto tenía que cruzar del Malecón Simón Bolívar hasta 9 de Octubre. En ese
momento observó que a toda velocidad venía un colectivo de color azul acentuado
y blanco por Malecón de Sur a Norte y por más que realizó su conductor una
maniobra brusca para evitar un atropello, de todas maneras alcanzó a un ciudadano que no respetó la luz
verde al cruzar esta vía, Observó también que de inmediato su conductor se dio
a la fuga. Como es natural en casi todas las personas me entró la
curiosidad por ver el desenlace de esta
desgracia y cuando llegó el vigilante le di la versión que hizo constar en el
Parte. Para concluir este interrogatorio
Con esta interesante e importante información se le hizo firmar su
declaración. Luego me dirigí a la Oficina de Revisión que en aquellos años
controlaba a los grupos de colectivos de la ciudad por intermedio de las listas
de salida desde la estación y su total recorrido. Me dediqué y me concentré a
tiempo completo a revisar prolijamente al listado del grupo ocho en lo
referente al día del accidente, ya que sus colectivos tenían el color azul y
blanco. Prosiguiendo en mis pesquisas pude darme cuenta que un colectivo cuyas
placas anoté al igual que su conductor, no había hecho el recorrido completo
por cuanto no había llegado a la estación a marcar su tarjeta. Dialogando con
el clase encargado de los listados de los grupos de colectivos, le averigüé el
tiempo que hace un vehículo desde la estación hasta las calles Malecón y 9 de
octubre. Cotejando tarjeta y lista me indicó el tiempo, dando como respuesta
que correspondía al colectivo que nunca llegó a la estación a marcar su tarjeta.
Anote todos los datos referentes al nombre del conductor que llamaba Carlos
Loor Pacheco y su número de licencia expedida en Manabí, pero registrada en la
Comisión de Tránsito del Guayas. Otra diligencia que realice fue averiguar si
el mencionado colectivo estaba laborando a raíz del atropello y muerte, se
comprobó que NO, por que en las listas posteriores al accidente no constaba.
Luego me encaminé al Departamento de Estadísticas, a cargo del señor Onofre
Avellán, ya fallecido quien me proporcionó el fácil
respectivo sobre la documentación de este conductor. Viendo su foto
aprecie que lo conocía perfectamente. Otro detalle importante que llevé a cabo
en la Secretaría de la Institución, fue averiguar el nombre del propietario del
colectivo quien también era chofer profesional llamado GALO CEDEÑO LOOR. Con
todas estas informaciones me encaminé al domicilio del propietario del vehículo
que presuntamente había sido el causante de este malogrado accidente y me
encontré con la sorpresa de que era conocido mío. De apodo le decían EL
GATO- de entrada le fui indicando que
por las evidencias recogidas durante mi investigación de este accidente de
tránsito, todo apuntaba a que su vehículo había sido el causante del mismo. Me negó
tajantemente que su carro ni chofer no tenía nada que hacer en este caso. Le
replique y le mostré los apuntes del listado de salida y entrada desde la
estación de su colectivo el día del accidente y el motivo por el cual desde esa
fecha no concurría a laborar. Me manifestó que la causa era por cuanto había
bajado máquina. Le solicité en qué taller lo estaban reparando y me dio, nombre
y dirección. Antes de retirarme le hice una advertencia, en el sentido de que
si estaba mintiendo para encubrir a su chofer, el era solidario responsable sobre
este atropello y muerte y se iría a la cárcel. A pasos apresurados me dirigí a
dicho taller que me indicó el Gato y hablé con su propietario y le indiqué el
motivo de mi visita. Me informó que si lo conoce a este señor, que es su
cliente pero que esta vez en ningún momento ha traído su vehículo para bajarle
máquina. Así mismo le advertí sobre las consecuencias que si en caso esté
mintiendo o encubriendo al gato. Venga y revise todo el patio del taller que
aquí no hay ningún colectivo de ese grupo. Así lo hice y se confirmó que el
propietario del taller me decía la verdad.
Para sorpresa mía esa misma tarde de aquel mismo día, el GATO CEDEÑO se
acercó a la OIAT., con un abogado dispuesto a decir la verdad. Le tomé la
respectiva declaración por mi persona, manifestando que efectivamente el día
del accidente su chofer CARLOS LOOR PACHECO, asustado llegó a su casa
a dejarle el colectivo por cuanto había atropellado a una persona en 9 de
Octubre y Malecón y que por esta causa se iba huyendo a Bahía de Caráquez,
Manabí, su tierra natal hasta arreglar su situación. Que por esta razón su
vehículo lo escondió y que estaba dispuesto a entregarlo. Leída que fue su
declaración la firmó delante de su abogado defensor, indicando su nombre y
apellido. MANUEL CEDEÑO LOOR, pariente del chofer causante de este atropello y
muerte. Con esta positiva declaración y todas las diligencias llevadas a cabo
por el suscrito sobre este accidente de tránsito se elevó el informe respectivo
ante el señor Juez, donde se concluía que el causante del atropello y muerte
ocurrido en Malecón y 9 de Octubre en esa mañana del mes de octubre de 1968,
era el chofer CARLOS LOOR PACHECO. En cuanto al señor BENITO ARCE MONTERO,
llamado el camarada Arce. No tenía nada que ver en este trágico accidente. Con
las investigaciones prolijas y minuciosas efectuadas en lo referente a un
accidente de tránsito en el cual había mucha tela que cortar, el personal de la
OIAT., muy capacitado liberó a un inocente de ir a la cárcel por un hecho que
no cometió, logrando la verdadera identidad del verdadero culpable. Otro causa
más que acrecentaba la fama de la OIAT., Y DE TODO SUS COMPONENTES.
CASO PLATON FRANCO
Un
hecho mortal que hizo sensación en esta ciudad, fue la muerte del joven VICTOR
PLATON hijo de un próspero comerciante
en el negocio del cacao, llamado también VICTOR PLATON FRANCO. La prensa de la época reseñó que una mañana
de un día de septiembre de 1968, apareció muerto en su departamento de soltero,
el joven VICTOR PLATON. Hecha la denuncia por su padre, de inmediato el
Departamento de la Policía, SIC., se hizo cargo de las investigaciones en el
lugar del homicidio. En primera instancia fue detenido para investigaciones el
empleado encargado de la limpieza del departamento donde residía el occiso, al
cual lo apodaba SAMBA LARGA. Al interrogatorio al que fue sometido declaró lo
siguiente. Que el día del crimen, como era costumbre hacerlo, llegó a las ocho
de la mañana a realizar su faena de limpieza. Lo que le extrañó fue encontrar
la puerta de entrada a la casa que estaba abierta. Ingresó con mucho cuidado y
se dirigió de inmediato hasta la pieza del joven VICTOR PLATON. Grande fue
sorpresa observar que su puerta de entrada también estaba abierta. De inmediato
entró a su interior y lo primero que vio fue un gran desorden y una gran
cantidad de botellas de licor. Previendo que algo malo podría haber ocurrido
avanzó un poco y se detiene sorprendido y estupefacto cuando ve que el cuerpo
de su jefe estaba detrás de un sillón aparentemente muerto. Se acerca y se percata
que tenía huellas de sangre en su pecho y ahí comprueba que estaba sin vida.
Inmediatamente llamó al papá, el señor VICTOR PLATON FRANCO, quien al llegar
consternado se desmayó de la impresión de ver a su hijo ya fallecido. Como es
lo usual se llamó a la Policía. Luego fue llevado hasta las dependencias del
SIC., donde fue interrogado por varias horas. Dentro de las preguntas y repreguntas que se le hizo fue
referente a su horario de trabajo. Ingresaba a laborar a las ocho
de la mañana y s retiraba después de las seis de la tarde y de ahí para
adelante no conocía de las actividades que realizaba el joven PLATON. A otra
pregunta si conocía quienes frecuentaban su departamento. Respondió que
asiduamente lo visitaban muchas damas, pero había una en especial. Se le
inquirió si la conocía bien y su nombre. Respondió que de conocerla de vista,
si, pero su nombre no, por cuanto era un asunto personal y privado de su
jefe, lo cual como es natural le estaba
prohibido indagar. En cuanto a sus amigos, respondió de igual manera. Como el
empleado no diera ninguna pista sobre la identidad del autor o los autores de este crimen, el
padre del occiso VICTOR PLATON FRANCO, persona adinerada e influyente, presionó
a los investigadores para obligarlo a que este éste se confiese en el
sentido que podría estar complotado con
rufianes del barrio u otros compinches conocidos de él para cometer este atroz
asesinato. Con ninguno de los métodos empleados por los agentes del SIC., para
que cambié su versión, no se pudo lograr ninguna pista que lleve al
esclarecimiento de este hecho mortal. El señor VICTOR PLATON FRANCO, empecinado
en que SAMBA LARGA tenía algo que ver en el crimen de su hijo, consiguió que
sea trasladado a Quito, para que sea investigado de una manera más técnica y
prolija por los investigadores de aquella ciudad. Nada se consiguió por cuanto
SAMBA LARGA se ratificaba en su versión original. El señor VICTOR PLATON siguió
insistiendo y consiguió que la INTERPOL lo investigue. Tampoco se logró hacerle
cambiar su versión anterior. Por último, obsesionado por saber quien mató a su
hijo y teniendo sospechas en el empleado, contrató a detectives del FBI.,
norteamericano para que lo interroguen. Varios de ellos arribaron al país y
ZAMBA LARGA fue sometido a severos interrogatorios inclusive le fue puesto el
detector de mentiras y tampoco se logró establecer quién mató a su hijo.
Viendo
los fracasos policiales, tanto del país, como de los Estados Unidos, en que no
se pudo establecer la identidad del autor o autores de la muerte de su hijo,
tomó una última resolución de traer a los encumbrados agentes de la SCONTLAD
YARK. Así mismo varios integrantes de esta famosa Policía Inglesa arribaron al
país para interrogar al cansado ZAMBA LARGA. Los indicados agentes ingleses empleando
sus conocidas argucias y todos los
métodos modernos a su alcance de la época tratando de obtener la verdad al
interrogado, no lograron descifrar este
difícil como enojoso y enredado embrollo
mortal. Posteriormente ZAMBA LARGA fue puesto en libertad al no comprobarse
ninguna responsabilidad en este indescifrable crimen.
VICTOR
PLATON, no se daba por vencido y seguía creyendo que ZAMBA LARGA tenía algo que
ver en la muerte de su hijo. Un amigo
suyo de apellido SWEET, le manifestó que debido a los fracasos de la Policía
Nacional, así como las mejores Policías del mundo, como son el FBI. Y la
SCONTLAND YARK, porqué no probaba con el capitán LAMOTA, Jefe de la OIAT., de
la COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS, a quien lo apodaban el SHERLOK HOLMES criollo
Efectivamente
por intermedio de uno de los directivos de la compañía BALDA, se logró que el
capitán MARIO LAMOTA, tome las riendas de este inexplicable caso. Y para tal
efecto se le facilitó una camioneta marca Willys de dicha compañía. Al siguiente día fui
llamado por mi JEFE, quien en una entrevista reservada me hizo conocer todos
los pormenores que ha rodeado este lamentable hecho de sangre. Se me instruyó
en el sentido de que este es un asunto policial y no de tránsito, pero como le
estaban pidiendo cooperación de una forma discreta y mucho sigilo y el caso aún
no se esclarecía y como la OIAT., había ganado mucha fama en similares casos,
se veía en la obligación de hacer las respectivas investigaciones fuera de su
ámbito, pero siempre con el visto bueno del JEFE DE TRANSITO, COMANDANTE MARTIN
RIERA VARGAS. Me ordenó que me vista se civil para empezar las investigaciones.
El primer paso que tenía que darse era localizar a ZAMBA LARGA. Para tal efecto
se empezaron las indagaciones para saber donde vivía este individuo. Después de
prolijas averiguaciones se logró ubicarlo en las calles Loja y Andrés Matheus,
aledaña al hospital Luis Vernaza. A las seis de
la mañana provisto con vestimenta
de Ingeniero me acerqué a su departamento que era en el interior de un
conventillo y al preguntar por él salió su conviviente quien me manifestó que
no se encontraba. Le dejé un recado
indicándole que necesitaba su servicio
como albañil. Tres días concurrí y no se lo pudo localizar. Huidizo, Receloso y desconfiado por los avatares e
interrogatorios a que había sido sometido tiempos atrás en lo relacionado a la
muerte del joven VICTOR PLATON, se negó a concurrir. Posteriormente se armó un
operativo en el cual actuó el suscrito y
el cabo LENIN FARFAN BRIONES donde se logró
llevarlo a la OIAT., donde el capitán LAMOTA lo interrogó personalmente,
junto a mi persona. Se ratificó que era
inocente. Lo declarado por ZAMBA LARGA en esta oficina es lo que se hace
constar al principio de este relato. Una vez que rindió esta declaración
firmada, junto a su abogado, fue puesto en libertad.
LA
OIAT., siguió en estas investigaciones y por unos informes reservados que
llegaron al autor de esta obra, y que se pedía mucha reserva en el cual la
informante pedía que se omita su identidad,
en el sentido que tenía una relación extramarital con un Oficial de la CTG., Se
pudo establecer lo que en verdad sucedió la madrugada en que se suscitó este
lamentable hecho de sangre. Uno de los amigos del finado VICTOR PLATON que
estuvo presente en aquella reunión fatídica y que también solicitó que se
guarde en reserva su identidad, manifestó. Que aquella noche habían concurrido
algunas personas, entre damas y caballeros a una francachela que era común en
varios días de la semana. Principalmente una de las damas preferidas por el
joven PLATON que prácticamente era su amante,
una vedette de origen Chilena, hermosa y despampanante por cierto,
coqueteaba con todos los hombres presentes. Tragos vienen y tragos van y al
calor de estos de un momento a otro se armó una bronca entre el anfitrión y un
amigo suyo de mucha solvencia económica, perteneciente a una conocida familia
de la provincia de El Oro. El motivo fue el CELO, ya que el Orense pretendía a
la vedette y PLATON se lo impedía. En un momento de descuido de todos, el
enfurecido invitado sacó un arma blanca y le asestó una puñalada en el corazón
al joven Platón que cayó fulminado al suelo. En ese mismo instante en vez de
auxiliar al herido, todos abandonaron el lugar para no verse comprometidos en
este hecho de sangre. Para terminar hace constar que VICTOR PLATON, como era
soltero y vivía solo, celebraba frecuentemente estas fiestas entre sus amigos.
El autor de este crimen al siguiente día voló a los Estados Unidos donde no
regresó al país por mucho tiempo.
CRIMEN DE UN POLICIA BARRIAL
A
finales del mes de agosto de 1969, se conformó una patrulla del personal de la
OIAT., al mando del cabo Julio Minchala Vera, como ayudante el vigilante
Alfonso Echerry Barzola y como conductor el cabo Gonzalo López Cepeda, con la
finalidad de realizar rondas para el cumplimiento de nuestras labores de
investigación y capturas. para tal efecto se nos daba la camioneta de la
oficina. En estas circunstancias recibimos la orden del sargento Pablo Suárez
Hurtares, encargado del Departamento para que nos traslademos hasta la estación
de los colectivos de la línea 4, lugar donde se tenía conocimiento que estaba
laborando un chofer causante de un accidente de tránsito con saldos fatales
ocurrido meses atrás y se proceda a su captura por intermedio de una boleta
emitida por el señor Juez de Tránsito. Por aquellos días el Jefe de la OIAT.,
capitán MARIO LAMOTA RIVAS se encontraba asilado en la clínica Guayaquil
tratándose una dolencia renal.
Estando
cerca de nuestro objetivo, observamos a una gran muchedumbre que al observar al
vehículo tipo policial, junto a nuestra presencia, algunos de ellos nos hacían
señas que nos apresuremos. Aceleré y pronto llegamos al sitio donde algunos
ciudadanos visiblemente exaltados nos indicaron que recientemente en las
cercanías de este lugar un grupo de malhechores que habían salido de una
cantina adyacente a la estación en estado etílico sin razón aparente habían
asesinado a un Policía Barrial, cuyo cuerpo yacía en el suelo esperando que concurra
la Autoridad competente a realizar su levantamiento. Cuando recibíamos estas
explicaciones, de pronto se acercaron otros ciudadanos a manifestarnos que los
causantes de este vil crimen se encontraban todavía en el teatro d los sucesos.
De inmediato se iniciaron las acciones pertinentes para lograr su captura, por
lo que el cabo Minchala ordenó que se realice su persecución. Efectivamente los
rufianes caminaban tan orondos como si nada hubieran hecho. Se prendió la
sirena del vehículo lo que asustó a
estos individuos quienes salieron en apresurada carrera para evitar ser
apresados. Los aludidos se refugiaron en el patio de una casa del sector
abandonada donde se atrincheraron. Los uniformados al tratar de ingresar para
capturarlos fueron recibidos a bala por lo cual tuvimos que buscar abrigos en
paredes y piedras grandes que existían en el sitio. Fue una balacera de parte y
parte, donde nadie resultó herido. En esta mini batalla de balas, a los
criminales se les agotó sus municiones, al igual que a nosotros por lo que
huyeron del lugar para irse a refugiar a otra casa, pero esta si estaba
habitada. Los propietarios no les abrieron las puertas, motivo por el cual
quedaron desamparados, situación que fue aprovechado para lograr detenerlos,
pero estos presentaron una feroz resistencia, teniendo en cuenta que nos
superaban en número, eran 6 y los
uniformados tres. Por este motivo se desarrolló una lucha cuerpo a cuerpo que
ya estábamos a punto de ser doblegados, pero en ese momento llegó un vigilante
llamado Enrique Guayas Fernández quien entró a colaborar, pero seguíamos en
inferioridad y temíamos lo peor. Pero una circunstancia salvadora cambió el panorama, y esta fue cuando
llegaron una gran cantidad de choferes, cobradores y moradores quienes entraron
a colaborar y se hizo posible apresar a
los seis criminales. Pocos ratos después llegaban más refuerzos venidos desde
la Prevención de Tránsito. Luego de este lamentable incidente los culpables de
este hecho de sangre fueron llevados detenidos al cuartel del Cuerpo de
Vigilancia, donde posteriormente pasaron a los calabozos del Cuartel Modelo.
Al
siguiente día Radio Cristal en su noticiero matutino resaltó la labor del
personal de la OIAT., en esta acción y captura relevando su lucha y heroísmo.
Así mismo los Diarios El Universo y Telégrafo destacaron en sus primeras
páginas este hecho, felicitando al personal de la OIAT., que en
cumplimiento de su deber en una labor
que no era de su competencia habían arriesgados sus vidas capturando a un grupo
de peligrosos delincuentes y criminales que habían asesinado impunemente a un
Policía Barrial de apellido BAJAÑA. El señor ENRIQUE GRAU RUIZ, Gobernador de
la provincia del Guayas y Presidente nato de la COMISION DE TRANSITO DEL
GUAYAS, al enterarse de tan positiva noticia que difundían los Medios de
Comunicación de esa época, dispuso de inmediato
una reunión urgente de todo el Directorio de esta Institución con la
finalidad de evaluar y felicitar a tan abnegados y valientes miembros de la
OIAT., pertenecientes al Cuerpo de Vigilancia, que habían arriesgados sus vidas
en la lucha contra el hampa.
Al
siguiente día fuimos notificados para que nos presentemos en el seno del
Directorio con la finalidad de recibir un homenaje en pleno de quienes componen
esta Institución. En el discurso de bienvenida que dio el señor ENRIQUE GRAU
RUIZ, como gobernador y Presidente nato de la COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS,
alabó nuestra actuación y justificó que por nuestra valiente actuación
arriesgando nuestras vidas, teníamos derecho a recibir un homenaje, tanto de
felicitación así como pecuniario y un ascenso. Puso en consideración su pedido
al resto del Directorio, el que fue aprobado casi unánimemente, pero hubo una
salvedad de parte del delegado de la Policía, un Coronel de apellido MIER,
quien no estuvo de acuerdo con lo solicitado por el señor ENRIQUE GRAU,
indicando y justificando que solamente se nos de un voto de aplauso. Como hubo
mayoría se aprobó los ascensos, al grado inmediato de sargento, medallas al
heroísmo y una gratificación en dinero.
PARA
CERRAR CON BROCHE DE ORO, LA HISTORIA DE LA OIAT., Y PARALELAMENTE PARTE DE LA
FUNDACION DE LA COMISION DE TRANSITO DEL GUAYAS, RECALCAMOS EL MERITO DE TRES
MIEMBROS DE ESTE DEPARTAMENTO, COMO SON EL SUBOFICIAL ARMANDO LENIS AYALA,
SUBOFICIAL GERMAN SIMISTERRA GONZALEZ Y SARGENTO SEGUNDO ANDRADE CHAVEZ, QUE
CUMPLIENDO CON SU DEBER REALIZARON UN MINUCIOSO OPERATIVO PARA SALVAGUARDAR LA
INTEGRIDAD DE LA VIDA DEL DOCTOR JOSE MARIA VELASCO IBARRA PRESIDENTE DE LA
REPUBLICA Y SU COMITIVA CUANDO SE DESPLAZABAN POR LAS CALLES DE LA CIUDAD DE
GUAYAQUIL EL DIA 9 DE OCTUBRE DE 1971.
ANTECEDENTES
El
capitán MARIO ALFONSO LAMOTA RIVAS, fue llamado de urgencia a la Presidencia de
la Comisión de Tránsito del Guayas, cuyo titular era el Dr. HECTOR SOLORZANO
CONSTANTINE. En una reunión reservada que tuvieron le hizo conocer sobre un
operativo que tendría que realizar y se escogería a un personal capacitado y de
confianza de la oficina a su mando.
De
inmediato el jefe convocó a los sargentos en esa época: ARMANDO LENIS AYALA,
Secretario de la OIAT., GERMAN SIMISTERRA GONZALES Y SEGUNDO ANDRADE CHAVEZ.
Estando ante su presencia les hizo conocer sobre un trabajo especial que
tendrían que efectuar urgente, prolijo y reservado. Se los instruyó con
punto y coma sobre el mismo, explicando
que se trataba de un operativo a realizarse, antes, durante y después de la
visita que haría a Guayaquil el Presidente de la República con motivo de sus festividades de
Independencia del 9 de Octubre de 1971. Antes de poner término a esta reunión,
les manifestó que este trabajo especial se le había encargado a la OIAT.,
debido a su excelente trayectoria en sus actuaciones y se había dejado de lado
a los servicios de Inteligencia tanto de la Policía, así como los del Ejército
y de más servicios secretos que tiene el Estado porque se dudaba de su
eficiencia. Tengan en cuenta que este es un gran mérito y honor que se nos
delegue un caso tan importante al cual tenemos que cumplir sin fallas. No
queremos fracasos sino éxitos. Lo que les estoy exponiendo se deriva por cuanto
se tienen ciertos rumores de que se quiere atentar contra la vida del señor
Presidente de la República, el doctor JOSE MARIA VELASCO IBARRA y eso hay que
evitarlo llevando un buen trabajo. Con esta patriótica arenga culminó y les
dijo. Pónganse a laborar de inmediato que el tiempo apremia. El sargento GERMAN
SIMISTERRA lo catalogó como un verdadero rompecabezas, al que había que
descifrarlo trabajando inteligentemente y de manera concienzuda.
Vestidos
de civil, GERMAN SIMISTERRA junto a su compañero SEGUNDO ANDRADE, provistos de
los más elementales y necesarios implementos se dirigieron a cumplir su
cometido. En primer lugar elaboraron un
croquis que abarcaba el sector junto a todas las edificaciones asentadas en
aquellos lugares, desde donde estaba la
Gobernación del Guayas, situada en el Malecón Simón Bolívar y la calle Aguirre,
siguiendo hasta el Boulevard 9 de Octubre y finalizando en Lorenzo de Garaycoa,
donde se encuentra el Parque Centenario y en su interior la Columna de los
Próceres sitio al cual tenía que depositar una ofrenda floral el señor
Presidente de la República. En segundo lugar nuestra misión específica era
saber el número de personas que habitaban en aquellas viviendas, tomando sus nombres
y apellidos y para tal efecto se tendría que visitar casa por casa de todo el
sector indicado y a sus ocupantes, sean propietarios, o inquilinos. Para no
despertar ninguna sospecha sobre el motivo de nuestra presencia se planificó
una estratagema y ardid en la que de manera encubierta se les manifestaría un
supuesto pretexto que esta visita se debía a una futura instalación de
semáforos por estos contornos y una campaña próximamente de peatones para
salvaguardar sus integridades. Se
identificaron con credenciales aparentando que era supervisores de una compañía
importadora de estos aparatos. Por lo tanto era necesario realizar un completo
censo determinando con el mismo cuántas personas habitaban en aquel inmueble.
Algunos aceptaban de buen agrado, otros a regañadientes y como nunca faltan los
contreras, hubo una persona que no se tragó el anzuelo y se quejó con una carta
al Diario El Telégrafo. En este operativo se determinaron con exactitud los
lugares altos de los grandes edificios, así como inmuebles desocupados que
podrían ser lugares donde podrían esconderse individuos armados para atentar
contra la vida del señor Presidente. También se señalaron los lugares visibles
donde podrían ubicarse francotiradores para la protección del primer Magistrado
de la nación. Prosiguiendo en estas labores se registraron minuciosamente algunos edificios en construcción que podrían
ser lugares peligrosos para realizar atentados. Así también se les solicitaba a
los ingenieros encargados de aquellas obras, la nómina total de sus
trabajadores. Poco antes de terminar nuestro trabajo, nos encontramos con una
sorpresa mayúscula ya que salió a la luz un hecho que hizo saltar a la
seguridad militar. Se descubrió que justo frente a la Segunda Zona Militar,
ubicada en 9 de Octubre y Lorenzo de Garaycoa, existía un patio y en su
interior vivían algunas personas con un dialecto diferente, motivo por el cual
se les solicitó sus identidades estableciéndose que eran de origen Peruano y se
presumió que podrían ser espías. Se dio parte al mando de la Segunda Zona
Militar sobre esta presencia sospechosa
y de inmediato el Servicio de Inteligencia Militar tomó los procedimientos
respectivos tomando muy en cuenta que aquellos ciudadanos extranjeros habitaban
frente a u lugar estratégico como es un
recinto militar.
Una
vez que se culminó todo el trabajo asignado a los tres miembros de la OIAT., se
elevó un informe al señor Presidente de la Comisión de Tránsito del Guayas,
doctor HECTOR SOLORZANO CONSTANTINE. Este lo hizo revisar prolijamente
consultando a técnicos en la materia entendidos en estos menesteres, quienes
expusieron sus puntos de vistas, indicando
que era un trabajo perfecto. Que había que felicitarlos. Con todo
manifestó el doctor HECTOR SOLORZANO que había esperar resultados el día que el
señor Presidente doctor JOSE MARIA VELASCO IBARRA visite la ciudad en tan magna
fecha. Para concluir indicaron. Que si
el mismo procedimiento se hubiera realizado en la ciudad de Dallas, Texas,
Estados Unidos, el 22 de noviembre de 1963, se hubiera evitado el magnicidio
que acabó con la vida del malogrado Presidente norteamericano JOHN F. KENNEDY.
El
doctor JOSE MARIA VELASCO IBARRA y su comitiva, recorrió tranquilamente a pie
todas las calles citadas que fueron revisadas, saludando a la gente que lo
aclamaba sin ningún contratiempo. En el desfile que presidió por la
independencia del 9 de Octubre. Se había llegado a un feliz epilogo final.
Por
este extraordinario y eficaz trabajo llevado a cabo por tan destacado personal,
se dispuso que en una fecha cercana sean ascendidos a SUBTENIENTES, LOS
SARGENTOS ARMANDO LENIS AYALA, GERMAN SIMISTERRA GONZALES Y SEGUNDO ANDRADE
CHAVEZ.
Precisamente,
como un caso de RIPLEY y por esas cosas negativas que se dan en la vida,
el día que se dio el golpe de estado LIDERADO POR EL GENERAL GUILLERMO
RODRIGUEZ LARA derrocando al doctor JOSE MARIA VELASCO IBARRA, llamado el
Carnavalazo, iban a ser ascendidos en una a ceremonia especial al grado
dispuesto, los tres aludidos sargentos.
FIN
ESTA MAGNA OBRA se terminó de elaborar el día 15 de septiembre
del 2009.
EL AUTOR
GONZALO RENE LOPEZ CEPEDA
Correo electrónico Gonzalo. lopezc@hotmail.com
Teléfono: 2447501